La reina Máxima y el rey Guillermo de Holanda se encuentran organizando la más importante celebración de sus vidas, los primeros diez años de los monarcas frente al trono de Países Bajos.  Solo un evento como estos podría opacar la coronación del rey Carlos III de Inglaterra.

Máxima y Guillermo están a pocas semanas de cumplir su primera década como reyes de Holanda y el festejo que están preparando desde la Casa Real tendrá alrededor de cien invitados y algunas excentricidades que han sorprendido a sus ciudadanos. 

Una de las decisiones más llamativas que tomaron los reyes de Países Bajos es dejar que los privilegiados que se sentarán a la mesa junto a la Familia Real sean elegidos mediante votación. Es así como el público será el encargado de seleccionar a los afortunados que celebrarán la primera década de los monarcas.

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Quienes participen de esta particular selección, deberán argumentar sobre su elección. No puede ser cualquier persona la que se siente junto a los reyes de Holanda, sino aquellos que destaquen con alguna cualidad que represente un triunfo para la comunidad, como un líder o un activista.

Así las cosas, el próximo 30 de abril la reina Máxima y el rey Guillermo compartirán la mesa con cien personalidades que, día a día, marcan una diferencia dentro de su comunidad y celebrarán junto a ellos sus primeros diez años frente a la corona de Países Bajos.

Entre los más bellos recuerdos que guardan Máxima y el rey Guillermo de la  ceremonia en la que oficializaron su lugar en el trono, uno de los más destacados es el impactante discurso que dio él frente a más de 20 mil personas, quienes los esperaron en los alrededores del mítico Palacio de Ámsterdam para demostrarle todo su apoyo.

Mientras llega el momento para el rey Carlos, el 6 de mayo, y a  pocas semanas de la  especial celebración de la reina Máxima y el rey Guillermo, los soberanos están depositando todas sus energías en la organización de este evento que, por otro lado, despierta grandes preocupaciones porque deberá contar con máximas medidas de seguridad, tras los ataques que sufrió la princesa Amalia los últimos meses.