El batería de los Rolling Stones, Charlie Watts, “uno de los mejores bateristas de su generación” y el miembro más mesurado de la célebre banda de rock británica, murió ayer en Londres a los 80 años.
“Con gran tristeza anunciamos la muerte de nuestro querido Charlie Watts”, anunció su agente Bernard Doherty en un comunicado, añadiendo que el músico “falleció tranquilamente en un hospital de Londres hoy mismo, rodeado de su familia”.
Un portavoz del artista ya había anunciado a principios de agosto que no participaría en la gira norteamericana de la banda, prevista para el otoño boreal, por motivos médicos. “Charlie ha sido operado con éxito, pero sus médicos creen que necesita descansar”, explicó entonces, sin más precisiones.
Watts, que cumplió 80 años en junio, llevaba en los Stones desde 1963. Junto con el cantante Mick Jagger y el guitarrista Keith Richards, era uno de los miembros más antiguos de la famosa banda de rock, en la que también han participado Mick Taylor, Ronnie Wood y Bill Wyman.
En 2004, había sido tratado en el Hospital Royal Marsden de Londres de un cáncer de garganta, del que se recuperó tras cuatro meses de tratamiento; incluidas seis semanas de radioterapia intensiva.
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“Charlie era un amado esposo, padre y abuelo y también, como miembro de los Rolling Stones, uno de los más grandes bateristas de su generación”, afirmó Doherty.
“Pedimos que se respete la intimidad de su familia, de los miembros de la banda y de los amigos cercanos en este difícil momento”, añadió.
Para Manolo Bellon, locutor y periodista musical, “Charlie Watts fue uno de los bateristas más importantes del rock. El baterista es quien pone el ritmo y marca la forma en que los demás tienen que tocar, esto es importante en los Rolling Stones porque en los conciertos uno veía que el guitarrista con frecuencia estaba de espaldas al público, mirando a Charlie Watts, buscando en él su inspiración. Por más de que lo reemplacen por otros bateristas, es realmente irremplazable. Watts aportó mucho más que un simple acompañamiento, porque fue muy creativo, viniendo de una tradición de jazz la aplicó al rock de una forma maravillosa y a los temas bluseros que hicieron los Rolling Stones”.
Alejado de la vida loca
Watts, que siempre se mantuvo alejado de la loca vida que vivían sus compañeros, siguió siendo durante más de medio siglo el imperturbable metrónomo de la banda mientras alimentaba su pasión por el jazz.
Con su rostro impasible y su talento unánimemente reconocido para el ritmo binario, ofrecía el contrapunto perfecto en el escenario a los frenéticos contoneos de Mick Jagger y las payasadas eléctricas de los guitarristas Keith Richards y Ronnie Wood.
Y mientras sus amigos pasaban por “divorcios, adicciones, arrestos y peleas locas”, según un inventario recopilado por el diario británico Mirror, el tranquilo Charlie Watts vivía una vida serena con Shirley Shepherd, su esposa desde hacía 50 años, y su hija Seraphina, en su granja de cría de purasangres árabes en Devon, Inglaterra.
“Durante 50 años de caos, el batería Charlie Watts representó la calma en medio de la tormenta de los Rolling Stones, tanto dentro como fuera del escenario”, escribió el Mirror en 2012. Sin embargo, el músico no era impermeable a las adicciones de la banda: en la década de 1980, se sometió a rehabilitación por heroína y alcohol. “Pero fue un tiempo muy corto para mí”, explicó él mismo. “Simplemente lo dejé, no era algo para mí”, confesó el músico.
“Es la pérdida de una leyenda, un baterista icónico que estuvo 60 años —se cumplen en 2022— y junto con Keith Richards y Mick Jagger, eran los únicos miembros originales”. Manolo Bellon, locutor y periodista musical.
Pasión por el jazz
Nacido el 2 de junio de 1941 en Londres, Watts llegó a la música a través del jazz animado a los 13 años por su vecino Dave Green con quien después formaría el cuarteto ‘The A, B, C & D of Boogie-Woogie’.
Totalmente autodidacta, aprendió a tocar de oído, observando a los músicos de los clubes de jazz de Londres. “Nunca fui a una escuela para aprender a tocar jazz. Eso no es lo que me gusta. Lo que me gusta del jazz es la emoción", explicaba el músico que durante su carrera con los Rolling Stones, siguió tocando jazz en paralelo y grabó varios discos con el Charlie Watts Quintet y con el grupo Charlie and the Tentet Watts.
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Pero primero estudió arte y trabajó como diseñador gráfico en una gran agencia de publicidad. Cuando se unió a los Rolling Stones en 1963, no eran más que una banda pequeña e incipiente. “Fue una bendición”, decía Keith Richards. “El primer batería con quien empecé hace 40 años es uno de los mejores del mundo. Con un buen batería, eres libre de hacer lo que quieras”, agregaba.
Sobre la gira de los Stones
La gira de The Rolling Stones, que debía haberse realizado el año pasado, fue aplazada a causa de la pandemia de coronavirus. Empezará el 26 de septiembre en San Luis (Misuri) y terminará el 20 de noviembre en Austin (Texas). Se había previsto que si Watts no podía participar, sería remplazado por Steve Jordan. “Tenemos verdaderas ganas de volver a ver a Charlie, en cuanto se haya recuperado completamente”, había tuiteado Mick Jagger.
Reacciones y nuevo baterista
Elton John: Un día muy triste. Charlie Watts fue el baterista definitivo. El más elegante de los hombres y una compañía tan brillante. Mi más sentido pésame para Shirley, Seraphina y Charlotte. Y, por supuesto, The Rolling Stones”.
Paul McCartney publicó un video con un mensaje de condolencia a la familia del baterista “Charlie era una roca y un fantástico baterista. Te amo Charlie, siempre te he amado, un hombre extraordinario y mis condolencias a su familia”.
Ringo Star tuiteó: “Dios bendiga a Charlie Watts, te vamos a extrañar, hombre, paz y amor a la familia Ringo”.
Richard Jeter, comediante: “Amaba a Charlie Watts tanto por su forma de tocar la batería como porque durante la mayor parte del tiempo que he estado consciente de él, parecía que podría ser el sensible criado vampírico de un malvado señor supremo, moviendo silenciosamente los hilos en el fondo. Dejando a un lado las idiosincrasias de mi cerebro, una verdadera leyenda”.
Steve Jordan, baterista amigo de Keith Richards, reemplazará a Charlie Watts. El músico participó en 1997 en la grabación de ‘Mucha suciedad’, primer álbum del segundo período en solitario de Andrés Calamaro, tras la disolución de Los Rodríguez.