Uno de los grandes exponentes del latin jazz, el destacado pianista y compositor cubano Chucho Valdés, llegará a Cali, para deleitar a los amantes de este género, en una nueva versión del afamado encuentro de creadores de Jazz Fusión y experimental, el Festival Ajazzgo.
Junto a él estará el saxofonista y clarinetista, Paquito D’Rivera, con el proyecto ‘Reunión Sexteto’, marcando la historia musical con su reencuentro, pues fue hace 42 años, cuando ambas leyendas, trabajaron juntas en el reconocido grupo Irakere.
El País habló con el pianista que se presentará en una única función en el Teatro Municipal Enrique Buenaventura el próximo 14 de septiembre.
¿Qué significa para usted, después de 42 años de separarse de Paquito D’ Rivera, en Irakere, volver a compartir un escenario?
Es algo mágico. Para mí Paquito es uno de los músicos más importantes de este planeta, pero además, junto conmigo, y otros músicos, somos los fundadores del grupo Irakere. Juntos tuvimos una trayectoria de trabajo muy larga. Una vez escuchaba una obra que yo había escrito, a la cual Paquito le hizo un arreglo para cuatro clarinetes y me emocionó tanto, que lo llamé y le dije: “eres genial. todavía te extraño”. Y la respuesta de él fue: “yo también te he echado de menos amigo”, Así que dijimos bueno, entonces vamos a juntarnos de nuevo después de 42 años. Nos pusimos de acuerdo e hicimos un disco precioso llamado ‘También te he echado de menos’ , que ha tenido muy buena acogida y con el cual ya hemos hecho giras por Miami, Puerto Rico y Europa. Ha sido maravilloso trabajar nuevamente con él.
En el año 2010 usted estuvo en Ajazzgo, tocó solo en esa oportunidad, pero ahora tocará con Paquito, ¿Qué cree que va a ser lo diferente en esta ocasión?
Más experiencia, más caminos recorridos. Pienso que tras el disco, esto va a dar para mucho más. Ahora tenemos más madurez. Yo creo que es lo mejor de nuestra historia, lo que estamos haciendo hoy.
En el Jazz ha predominado, casi siempre, la presencia masculina, ¿Qué piensa del boom de las mujeres que participan en él?
Hay presencia femenina, sin duda. El último Grammy que yo gané fue con un disco de mi amiga y cantante Eliane Elias, una muchacha que toca y canta muy bien. Así que hay una cantidad de mujeres haciendo maravillas. Carla Blake ha sido un símbolo de lo que es la mujer en el Jazz. Las mujeres soy respetables, muy respetables.
Hablemos de sus inicios, ¿por qué se inclinó por el piano?
El piano fue mi primer juguete, era el piano de mi papá y cuando él se levantaba del piano, yo me sentaba. De bebé me sentaban a ponerle los deditos. Así que empecé a tocarlo con apenas cuatro años. Fue en el mundo en que nací, el que me gustó, y nunca pensé en otro instrumento.
¿Cuáles han sido esos grandes escenarios que usted recuerda con especial afecto?
Fue la primera vez que después de muchos años pude volver a tocar en dúo con mi papá, con Bebo Valdés, mi maestro. Ese para mí fue el momento más interesante y más soñado de mi vida, tocar con mi papá, quien me enseñó lo que sé. Fue en San Francisco, Paquito invitó a papá y a mí, ahí tocamos juntos por primera vez. A partir de ahí seguimos haciendo muchas cosas. Compartimos gira con Diego el Cigala, y después con Bebo y Chucho, hicimos un disco que se llama ‘Juntos para siempre’ y con él ganamos el Grammy Latino, y el Premio a la Música en España, esos fueron los momentos más importante para mí, en toda mi carrera.
Cuándo recibe un premio, ¿qué significa para usted?
Un compromiso. A veces me asusta porque cuando uno recibe un premio se compromete a que las próximas 10 canciones tienen que ser mejores.
¿Qué va a poder apreciar el público caleño en esta “juntanza” en Ajazzgo?
Vamos a tener una panorámica de algunos temas que fueron estándar con el grupo Irakere, como el mambo influenciado y Claudia, y el nuevo título del disco que es ‘También te he echado de menos’. Hay un grupo de músicos que nos acompaña. Diego Urcolas, el trompeta y el trombón, Dani Prieto en la batería, José Armando Gola en el bajo, y Roberto Junior Vizcaíno. Para mí, un sexteto genial.
Chucho y Cali
Dionisio Jesús Valdés Rodríguez es pianista, compositor, profesor de música y arreglista musical. Con 80 años de vida, le ha entregado a la música latina sonidos transformadores y nuevas experimentaciones. En esa búsqueda de sonoridades ha combinado, de forma magistral, la música tradicional afrocubana, con el jazz y el rock.
¿Qué significa para usted regresar a Cali?
Cali para mí es una ciudad muy importante. Toqué en el Teatro Jorge Isaacs con la Orquesta Sinfónica, pero también toqué en el Festival de Salsa, y presenté un concierto con los Irakere de música afrocubana, o sea que por Cali he pasado varias veces y siempre me voy con las mejores impresiones.