El escándalo que envuelve al productor de Hollywood Harvey Weinstein crece vertiginosamente y, en medio del aumento de acusaciones de abusos y acoso sexual por parte de actrices y modelos, su esposa Georgina Chapman decidió separarse.

“Se me rompe el corazón por todas las mujeres que han sufrido un dolor tremendo por estas acciones imperdonables. He decidido dejar a mi marido”, dijo Chapman, fundadora de la prestigiosa casa de moda Marchesa, en un comunicado enviado a la revista People.

Chapman había guardado silencio desde que la semana pasada The New York Times destapó el historial de supuestos casos de acoso protagonizados durante décadas por Weinstein, aunque el productor había afirmado que su mujer le apoyaba “al cien por cien”.

Con sus declaraciones, Chapman contradijo a su marido y se une a una larga lista de actores e importantes entidades de Hollywood que se distancian de él, como el gigante del entretenimiento Disney, dueño de la productora Miramax que cofundó Weinstein.

Otra actriz reaccionó ante la noticia. Se trata de la francesa Florence Darel, conocida por haber trabajado en los años 90 con Éric Rohmer o Claude Berri. Ella denunció que el productor estadounidense Harvey Weinstein también tuvo un comportamiento inadecuado con ella.

Disney, que despidió a Weinstein en 2005, afirmó no tener constancia de “quejas, denuncias o acuerdos” sobre el comportamiento sexual del productor, y señaló que Miramax “operaba y se manejaba de forma virtualmente autónoma”.

Mientras el número de mujeres que han denunciado públicamente que fueron acosadas sexualmente por Weinstein asciende de forma imparable, las más recientes en dar un paso al frente contra el productor de cine son la británica Romola Garai y la neozelandesa Zoe Brock, según publicó el diario The Guardian.

Medios especializados como The Cut señalan que ya son 29 las mujeres que aseguran que fueron víctimas del poderoso productor, con actos sexualmente explícitos, comportamientos inapropiados o con contundentes represalias profesionales si se negaban a reunirse a solas con él.

Pero estas acusaciones de acoso y abuso sexual no pillan por sorpresa a todos, y algunos han admitido que los rumores sobre el comportamiento del productor circulaban por Hollywood desde hace años, como afirmó el propio George Clooney.

Incluso su hermano, Bob Weinstein, se manifestó al pedirle a Harvey una solución a este problema. “Mi hermano Harvey es evidentemente un hombre enfermo. Le he exigido que busque ayuda profesional porque la necesita de forma urgente. Su arrepentimiento y sus disculpas a las víctimas son palabras vacías, porque él aseguró que se sometería a un tratamiento y todavía estamos esperando que lo haga”, dijo al medio TMZ. 

A las condenas de actores de Hollywood de los últimos días se ha sumado también la más alta esfera política con los mensajes lanzados tanto por la excandidata Hillary Clinton como por el expresidente Barack Obama.

Clinton se mostró “impactada y horrorizada”, mientras que Obama, cuya hija mayor Malia trabajó de becaria este año en ‘The Weinstein Company’ dijo sentirse “asqueado” y que Weinstein debe ser condenado y rendir cuentas.

Tanto los Clinton como los Obama recibieron el apoyo de Weinstein en el pasado a través del partido Demócrata, para el que el destacado productor de Hollywood organizó varios eventos de recaudación de fondos.

Por su parte, la Academia Británica de las Artes Cinematográficas y de la Televisión (Bafta) suspendió “de forma inmediata” como miembro a Weinstein por considerar su comportamiento “totalmente inaceptable e incompatible con sus valores”.