El famoso actor de Hollywood Arnold Schwarzenegger reveló que hace pocos días se sometió a una cirugía para que le colocaran un marcapasos. En el último episodio de su podcast Arnold’s Pump Club, el también exgobernador de California contó detalles.
“El lunes pasado me operaron para colocarme un marcapasos y me convertí un poco más en una máquina. Va en contra de gran parte de mi educación en Austria, donde nadie hablaba nunca de cuestiones médicas”, fueron las palabras del actor recordado por películas como Terminator.
Schwarzenegger, de 76 años, nació con una válvula aórtica bicúspide, un defecto cardíaco congénito. En medio del proceso que ha afrontado, ha sido inspiración para otras personas que también tienen su problema de salud.
“Hablar de mis cirugías de reemplazo de válvula les ha dado valor y esperanza para afrontar los suyos. Como sé que ir en contra de mi instinto reservado y ser transparente ayuda a la gente, me parece correcto hablar de esto”, añadió.
A lo largo de su vida, el actor se ha sometido a varias cirugías a corazón abierto para lidiar con este problema de salud. En 1997, Schwarzenegger tuvo un reemplazo de válvula pulmonar, procedimiento que ayuda a que la sangre fluya del corazón a los pulmones.
En 2018, tuvo una cirugía a corazón abierto para reemplazar la válvula pulmonar que le insertaron. Y a los dos años tuvieron que cambiar su válvula aórtica, es decir, la que ayuda a que la sangre fluya de su corazón a todo su cuerpo.
Sin embargo, tenía secuelas de la última cirugía, por lo que sus médicos le aconsejaron avanzar hacia el marcapasos. “Un tejido cicatricial de mi cirugía anterior había hecho que los latidos de mi corazón fueran irregulares. Así fue durante algunos años”, remarcó.
“Lo estoy haciendo genial. Me operaron el lunes (18 de marzo) y el viernes ya estaba en un gran evento ambiental con mi amiga y compañera defensora del fitness Jane Fonda. Nadie hubiera pensado jamás que comencé la semana con una cirugía”, mencionó.
Aunque este problema genético lo obliga a prestar mucha atención a su salud y practicarse chequeos regulares, el exfisicoculturista dice que jamás lo escucharán quejarse. “Todavía estoy aquí gracias a la innovación médica y a ser muy diligente para mantenerme en contacto con mis médicos y escucharlos”.