En 2022 Clara Chía era una joven que solo resonaba en un círculo muy cerrado élite de Barcelona, pero todo cambió una vez el mundo se dio cuenta que ella es el nuevo amor de Gerard Piqué. Un año después, la catalana es una celebridad mundial y no por su trabajo como relacionista pública o porque tenga otro talento artístico a presentar, sino porque se ha convertido en una “It girl española” por cuenta de sus apariciones masivas con el exfutbolista.
Luego de todo el revuelo que causó Clara en medio de la ruptura de Gerard con Shakira, la jovencita empezó a demostrar un cambio de imagen que ha cautivado a muchos, especialmente a las jovencitas de las nuevas generaciones, que ven en la española un referente de moda y estilo, cuyas premisas son usar básicos muy atemporales, detalles sutiles muy lujosos y accesorios que resalten sin rayar en lo estrambótico o lo excéntrico.
El “effortless style” es una tendencia que ha permanecido por muchos años, más que todo en las élites de varios países, y que se caracteriza por usar prendas que mezcladas entre sí generan looks monocromáticos o de bloques de color donde no se muestra un solo logotipo de marcas o unos muy pequeños, en lo que los textiles parecen cotidianos pero en esencia son de la más alta calidad, y las siluetas van desde lo elegante, hasta lo oversize para los más jóvenes, sin sexualizar ningún look.
Clara Chía es la fiel muestra de ello y ella se permite unas licencias de demostración de lujo especialmente con sus accesorios, hablando específicamente de sus bolsos, que tienen un patrón muy específico de ser pequeños, de cadenas largas y muy sencillos de usar, sin dejar de ser de casas de alta moda como Loewe, Prada, Hermés, Zadig & Voltaire y Sandro, siempre eligiendo ejemplares muy acordes a su personalidad.
Pero también hay que decir que Chía es una mujer que tiene un ojo ejemplar para identificar emprendedores de moda a resaltar. Gabriela Comella es una de ellas, cuya marca Gabriel for Sach y de este emprendimiento Clara decidió lucir un bolso azul celeste con tapa drapeada y cadena en correa graduable, que tiene un valor de 462 euros, es decir, dos millones de pesos aproximadamente.
Ahora, si vamos a enmarcar a Chía en el uso de alta costura, cabe mirar una de las imágenes paparazzis que le han hecho los reporteros gráficos a la catalana una vez salió de un lujoso restaurante al que asistió en compañía de su actual pareja. Ella vistió de pies a cabeza de la marca italiana Prada, siendo sus mocasines y su bolso los protagonistas del look.
Este accesorio era un ejemplar en cuero blanco texturizado con una placa dorada de la marca en la mitad de su parte frontal, que algunos incluso se atrevieron a comparar con el que usó Miranda Priestly en su primera escena en The Devil Wears Prada, llevando siempre todo a un extremo impensable. El bolso está valuado en unos 3.250 dólares, es decir, casi 14 millones de pesos colombianos.
Pero este no ha sido el único bolso de alta gama que ha usado Clara. Cuando asistió a los juzgados de Barcelona para hacerle frente a la demanda de Piqué al paparazzi Jordi Marti, la catalana pretendía defender sus supuestos daños psicológicos con la revolución mediática que sufrió con un bolso Loewe estampado en 3D y con remates en cuero color miel, que tiene un precio de 1.450 dólares, que vendrían siendo más de 6 millones de pesos colombianos.
Por el momento Clara Chía sigue tratando de pasar desapercibida en su cotidianidad y al parecer está muy feliz con su actual novio, disfrutando de los lujos que esto le permite.