Polifacético. Capaz de construir un texto en el que se descubren cinco miradas distintas y armónicamente entrelazadas en la novela más importante del Siglo XIX en Colombia y una de las más brillantes de Hispanoamérica.

Este 2017, en el que celebramos los 150 años de la publicación de ‘María’, de Jorge Isaacs, la historia ha vivido una especie de renacimiento, que la tiene paseándose a sus anchas por esta Feria del Libro, Cali Lee, como lo que es: la gran celebridad de nuestra literatura.

Esta tarde, a las 3:15 p.m., en el auditorio El País, carpa Cien Años de Soledad, hablaremos con Alberto Ramos de los cinco géneros que convergen en María. De esa mujer romántica, a la que el amor enferma y revitaliza, como en la más bella epopeya jamás descrita en nuestra geografía y cuyos detalles son precisos y preciosos en la narración que Isaacs logra de ese enamoramiento casi incestuoso de ese primer amor, intenso y condenado al imposible, que es el eje central de la historia.

María se convierte en paisaje y nos lleva de su mano a recorrer esa biodiversidad del Valle del Siglo XIX, desde su Hacienda El Paraíso o su original nombre de Casa de la Sierra. Y tal como nos lo recuerdan los autores en ‘María Cinco Géneros’, “describe y menciona bosques frondosos, vegetación exuberante, árboles de diferentes especies, caminos en medio de las colinas y en ocasiones los ríos Zabaletas, Nima, Amaime, sus remansos, hondas, vegas, picachos y boquerones”.

Siguiendo los caminos que nos proponen sus páginas aparece una María costumbrista, fiel a uno de los géneros de moda de su época (el costumbrismo). Esa María que llevaba encajes, enaguas, trencillas; que narra las bodas, el rodeo, la cacería, los velorios y los bailes y danzas como el bunde; la cultura, educación y modales de una familia acomodada como la que representa y a su vez las familias que sirven la suya... María se convierte entonces en una especie de cuadro en el que finamente el pincel de la palabra posibilita el milagro de que el autor pueda recrearla en su memoria.

En esa misma ruta, María nos evoca la historia que entonces enmarcaba la vida del Siglo XIX. La época de la esclavitud, que va de la mano de Feliciana (su nombre original era Nay) ‘la hija de Magmahú, uno de los jefes más distinguidos de los ejércitos de Achanti’. María devela esa época en que se gestaba la abolición de la esclavitud, la explotación en las minas y el trato de consideración que en algunos casos se le daba a los mismos, como a Lorenzo, el 'compañero fiel de mi padre', tal como lo recuerda el análisis de 'María Cinco Géneros'.

Toda esa riqueza narrativa se enmarca en la autobiografía que Isaacs hace de su vida en el Siglo XIX, enamorado de su prima Esther, agobiado por la muerte que se lleva también a su padre; protagonista de la historia política y social de entonces, de las inquietudes y reflexiones que obligaba ese momento de luchas y cambios... Esa es la María autobiográfica que también nos supone otro reto literario y otro encanto por descubrir.

Al final, el riguroso ejercicio de los autores con esta mirada a la novela, más que romántica, nos evoca también lo que ha sido su paso por el cine en tantas versiones como directores insignes; las facetas del autor, su historia personal y la cronología de su publicación, la historia del óleo y la tumba de María y la figuración de la mujer en el tiempo. 'María Cinco géneros' supone un ejercicio literario y analítico que servirá también para el estudio y la redefinición de la novela cumbre que después de 150 años aún no nos deja de cautivar.

Lo que dice el autor

'María Cinco Géneros’ habla de la importancia que en el Siglo XIX tuvo un escritor, del que no se percató el país de su capacidad y calidad. De lo polifacético que era Isaacs.

La novela aborda el género romántico, el relato histórico y la esclavitud de la época, la autobiografía de Isaacs, de su propia vida, la biodiversidad del Siglo XIX, la historia de la época...

Frases de Alberto Ramos Garbiras, autor de la obra junto a Carlos Andrés Cardona.