Luisa Fernanda Chará Palacios es la concursante que tiene impactados a los coach y al público de La Voz Chile. Su infancia y adolescencia transcurrió entre Cali y Jamundí, pero hace seis años vive en Santiago de Chile, donde ha hecho carrera musical en el metro, cantando con los que ella considera sus “maestros”, los artistas de la calle.
Con interpretaciones como Killing me Softly, de The Fugees y El Cantante, de Héctor Lavoe, esta joven ha enamorado a todos en el escenario de este reality musical. Hablamos con ella, quien sigue avanzando en el concurso.
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¿Cómo ingresó a La Voz Chile?
Una amiga, con quien habíamos cantado en el metro, me dijo que había salido de ‘The Voice’ y que nos presentáramos juntas en La Voz, la versión chilena. Me inscribí a lo último, porque tenía problemas con mis cuerdas vocales y no me sentía muy segura de participar, sin embargo, mi familia y amigos me dieron ánimo. Me presenté y pasé los filtros.
¿Había estado antes en concursos de canto en Colombia?
Sí, en Factor X Kids, en Colombia Tiene Talento y en The Voice, pero en todos me dijeron que no. Nunca pasé en ninguno de los realities de mi país.
¿Por qué escogió una canción en inglés?
Me dieron a elegir cinco canciones y escogí cuatro en español y una en inglés, Killing me Softly, que fue muy especial, porque me dio a conocer en el transporte público y en las calles; de hecho, hay un video que se volvió viral, en el que estoy cantando con una amiga ese tema. Pero me siento muy cómoda cantando en mi idioma, aunque me gusta arriesgarme.
¿Ha explorado muchos géneros con su voz?
¡Uff! Muchos. Cuando comencé a cantar, interpretaba rancheras, porque mi familia es de mariachis. Aprendí a cantar con Rocío Durcal, Selena Quintanilla y Ana Gabriel. Y a los 14 años cantaba mucho pop en español y dije “voy a intentar para mis 15 cantar un tema de Whitney Houston, I Will Always Love You. Yo no sabía inglés, y lo que hice fue imprimir la letra, escuchar muchas veces la canción, y así empecé con las baladas en inglés. Después tuve a mi hija y con mi pareja empezamos a hacer hip hop, porque él rapea y compone, me mostró sus creaciones, me enseñó a rapear. Yo quiero darme a conocer en el género urbano con un Trapsoul, y unir todo lo que aprendí en mi vida.
¿Qué es lo que más le gusta del rap?
En el metro hay unos raperos increíbles, ellos fueron los que me contagiaron todo este flow y esta sazón que no sabía que tenía. Para mí, ellos son mis pioneros. Yo me guío mucho por los nuevos exponentes, como Tupac Shakur, Juicy J, The Fugees y raperos chilenos a los que admiro.
¿Cómo ha sido la experiencia de representar a Colombia en Chile?
Ha sido maravillosa, porque representar a Colombia, a Cali, a Jamundí, en otro país, ha sido un orgullo y un honor. La gente de acá me ha apoyado demasiado y mi gente en Jamundí. Me siento muy feliz, todo lo que me ha pasado en este proceso ha valido mucho la pena.
¿Qué significó crecer en una familia con tradición mariachi?
Mi abuelo empezó siendo mariachi, luego tuvo su propio grupo y su sitio, Mexicali, un lugar emblemático en Cali. De ahí empezó el amor por la música, mi mamá también cantaba, mis tíos tienen voces espectaculares. Mi otra mamá, Pilar, es mariachi en Medellín, trabaja en La Chula. Mis dos mamás fueron mis profesoras de canto; se sentaban a mirarme y me ponían a cantar al frente del televisor con una canción de Selena sonando. A mis 4 años yo iba a la panadería de por mi casa, donde la señora Margarita y le decía: “Doña Margaritis, le canto Selena si me da dos pandebonos”. Desde niña sabía que quería ser cantante, imitaba a Shakira delante de los vecinos. Vengo de una familia de artistas, mi hermana canta, y mi hermano también y toca la batería.
¿Cómo ha sido su formación musical?
Nunca tuve clases de canto, pero era asidua a la Casa de la Cultura en Jamundí. Participé en algunos concursos. Cuando llegué a Chile, me asesoraron en interpretación y técnica vocal. En el metro fue donde aprendí todo lo que sé profesionalmente. Ahora estoy nominada a los Premios Lo Nuestro Chile.
¿Cuál coach hubiera elegido, si hubiera podido?
Me gusta mucho la música urbana y por esa razón quería que me eligiera Gente de Zona, pero se me presentó la oportunidad de estar con la Cami Gallardo, que es una excelente coach y un gran ser humano, y he aprendido mucho de ella en este proceso.
¿A qué desafíos se ha enfrentado en este concurso?
A nivel personal he tenido bastantes. Vengo desde muy pequeña lidiando con estereotipos. Como ‘Luipa’ soy muy segura en el escenario, pero este ha sido un largo camino. Fui una niña juzgada por mi fisonomía, por ser tan grande sufrí bullying en el colegio y fuera del entorno escolar. Entonces, era un tema bastante delicado para mí.
Al estar en la televisión uno se expone a muchos comentarios, temía ver mi imagen en la pantalla, después de haberla rechazado por tanto tiempo, pero esta vivencia me ha permitido superarlo, amarme, quererme más. Llevo seis años, después de tener a mi hija, trabajando en el tema del amor propio. Verme en televisión ha sido confirmar “vos sos más que todas esas cosas que te decían cuando eras niña”.
Aparte, he crecido muchísimo vocalmente. Había canciones que nunca había cantado y las interpreté con mi propio estilo. Como nunca tuve estudios, me sentía en la cuerda floja, por ser empírica, pero he estado trabajando mucho en técnica vocal, para dar lo mejor de mí.
¿Qué expectativas tiene de su futuro como artista?
Mis expectativas son grandes. Desde pequeña quería ser cantante y famosa, enviar un mensaje a mi público. Amo dar amor y que me den amor, siento que nací para eso. Siempre me imagino en un escenario gigante con mucha gente gritando mi nombre, dándome apoyo, recibiendo esa energía bonita, y yo brindándola. Me encantaría crear fundaciones para los niños, los ancianos, la gente de la calle, los animales, que la mitad de mi trabajo sea ayudar a la gente.
Jamundí y Cali
“En Ciudad Sur, en Jamundí, recuerdo que iba a las casas de los vecinos y les cantaba como Shakira, luego en la Feria de Jamundí. Siempre canté temas de ella y de Whitney Houston”
“Cuando vivimos en Cali, mi papá trabajaba como mecánico de motos en La 15, y mi hermano Bryan y yo hicimos la canción R-15, basada en nuestras vivencias. Esta pronto saldrá publicada”.
“Mi mamá vendía café en la galería, ahora tiene en Jamundí, Arepalacios. Es una guerrera, al igual que mi papá. Soy la menor de dos hermanos: Lady y Bryan.
Luisa Chará montó a sus 18 años una peluquería, luego, animada por su hermano Bryan, quien vivía en Chile, la vendió y se fue a dicho país a probar suerte.
El 11 de julio competirán en La Voz Chile diez concursantes. De estos elegirán 8 y seguirán los shows en vivo, el 20 de julio. Por políticas del concurso, Luisa no puede revelar públicamente si ella estará o no compitiendo en estos. Para apoyarla, está en Instagram y Facebook como Luipachara y el concurso se puede ver en la app Tele Latino-IPTV Play o PlutoTV.