Este fin de semana se dio un giro inesperado en el juicio contra Alec Baldwin, quien estaba acusado de homicidio involuntario. Este viernes, argumentando supresión de evidencias, se desestimó el caso la muerte de la directora de fotografía del filme Rust, Halyna Hutchins.
La defensa del actor había introducido una moción para solicitar la anulación argumentando que las autoridades “enterraron” evidencias del caso, a lo que la jueza Mary Marlowe Sommer accedió considerando que la supresión de evidencia potencialmente clave empañó el proceso.
Con apenas dos días de acción en el juzgado de Santa Fe, los abogados del actor y comediante neoyorkino presentaron una moción para anular el proceso con perjuicio, argumentando que el Estado escondió evidencia potencialmente clave, durante todo el proceso judicial.
Después de una jornada agotadora de interrogatorios a personas relacionadas con el caso resultaron algunas dudas sobre el manejo de dicha evidencia y la parcialidad de la fiscal Kari Morrissey, la jueza Mary Marlowe Sommer puso fin al caso.
“La retención voluntaria de esta información por parte del Estado fue intencionada y deliberada”, dijo Sommer”.
Al escuchar la respuesta de la jueza, el actor no pudo contener las lágrimas, demostrando su felicidad de por fin terminar con este largo proceso que inició en octubre de 2021, en el set de Nuevo México, donde rodaban ‘Rust’, una película de vaqueros de bajo presupuesto y un revólver que Baldwin apuntaba descargó una bala real que mató a la directora de fotografía de la cinta e hirió a su director.
Con la fama de Baldwin y lo poco común que son las muertes en el set en una industria con tantos niveles de control, como lo es la producción cinematográfica en Estados Unidos, la historia se volvió de inmediato un asunto global.
También polarizó opiniones, con gente viendo como víctima a Baldwin, un actor que desconocía que el arma tenía una bala real en vez de una de utilería, y otros calificando la muerte como una consecuencia de su supuesto comportamiento irresponsable.