Carolina Soto, conocida por su rol de presentadora en Día a Día de Caracol Televisión, ha ganado gran popularidad en Colombia y aunque aparece todos los días en la pantalla chica, también se mantiene muy activa en las redes sociales, donde comparte detalles de su vida familiar y personal con sus seguidores.
Recientemente, la presentadora caleña compartió un curioso incidente que ocurrió mientras estaba en el carro con su familia en Bogotá.
En una historia publicada en su cuenta de Instagram, mostró cómo se encontraron con un hombre vestido como sacerdote, quien estaba en la vía pública realizando una especie de bendición a los carros y conductores y en ella rociaba agua bendita y pedía dinero a los transeúntes.
Carolina, al verlo, expresó con entusiasmo: “Ay, qué dicha es esta, encontrarnos a un padre en la vía”, y rápidamente le pidió a su esposo que le diera dinero.
El momento fue captado en video, y, tal como sucedía con otros autos que pasaban por el lugar, su familia también se mostró dispuesta a participar en la actividad del supuesto cura.
De hecho, uno de los hijos de la presentadora sacó la cabeza por la ventana para recibir el agua bendita que el supuesto sacerdote lanzaba.
Sin embargo, poco después de compartir la experiencia en sus redes sociales, Carolina Soto recibió mensajes de sus seguidores alertándola sobre una posible estafa.
Muchos le comentaron que ese hombre no era un sacerdote auténtico, sino que ya había sido visto en otras partes de la ciudad haciendo exactamente lo mismo: pidiendo limosna a cambio de la supuesta bendición.
La presentadora, sorprendida por la noticia, contó más tarde cómo fue que se dio cuenta del engaño. “Estamos en shock, porque imagínense, pusimos lo del padre y me han escrito muchísimo, incluso me han mandado noticias diciendo que ese padre es falso”, explicó en una nueva publicación.
En su relato, también confesó que, cuando vio al hombre por primera vez, dudó de su autenticidad, pero decidió no cuestionarlo en ese momento y seguir el momento como si fuera genuino.
Además, la hija de Carolina le comentó que fue el padre quien les sugirió que sacaran la cabeza por la ventana del vehículo, mientras que Germán, el esposo de la presentadora, expresó estar molesto por lo sucedido.
“Increíble la gente tan descarada, abusando de la fe de los otros”, dijo él, visiblemente indignado.
La noticia comenzó a circular rápidamente, y varios seguidores de Carolina le enviaron mensajes para advertirle que el hombre ya había sido denunciado en redes sociales por realizar la misma “práctica” en diferentes zonas de la ciudad, como Usme, Chapinero y la carrera 80, donde las autoridades ya lo habían identificado como un fraude.
A pesar de la sorpresa inicial, Carolina y su esposo decidieron tomar la situación con humor. De hecho, Carolina confesó que Germán estuvo cerca de pedirle al “sacerdote” una oración por la familia y de darle una suma mayor de dinero, como 50.000 pesos, en lugar de los 5.000 que finalmente le dieron. A pesar de la mala experiencia, la familia se mostró aliviada y con una nueva perspectiva sobre lo ocurrido.