Después de un casting de más de 100 mujeres actrices entre los 34 y 44 años, Clara María Ochoa y Ana Piñeres, de CMO Producciones, eligieron a Carolina Gómez para el protagónico de La Venganza de Analía, que transmite Caracol Televisión de lunes a viernes, a las 8:30 p.m. por el Canal Caracol, y a una dupla masculina perfecta, Marlon y Brian Moreno, padre e hijo, para interpretar al personaje antagónico, el político Guillermo León Mejía, en su madurez y en su juventud.
“Carolina quedó entre las tres primeras y a esas tres les volvimos a hacer casting y ella se ganó el personaje en franca lid, era creíble, audaz, estratega, veraz e inteligente. Igual ocurrió con Marlon, un gran actor, serio, disciplinado, se ganó el papel por su maravilloso casting. Ya elegido, nos pareció lógico y procedente tener a Brian, quien había hecho un excelente casting para otro personaje, interpretando a Guillermo León en su juventud”, dice Clara María Ochoa.
Según la productora caleña, “abordar el tema desde lo político es retador, trabajar la serie desde la profundidad de los personajes era más exigente que las últimas series que hemos realizado, que tienen ingredientes musicales, humor o acción. Con Ana Piñeres pensamos que la protagonista fuera una estratega que hiciera evidente la moral y ética del asesino de su madre, queríamos además hablar de corrupción política”, agregó Clara María.
Brian Moreno
¿Cómo se dio esa retroalimentación entre padre e hijo para interpretar al mismo personaje?
La experiencia ha sido gratificante. Es la segunda vez que compartimos el mismo personaje. Hay una madurez más grande de los dos como personas y a nivel actoral. Es muy bonito poder compartir esto con mi papá porque es uno de los mejores actores del país, una persona a la que todo el tiempo le estoy aprendiendo mucho. Nos reunimos unos días antes y a medida que fueron avanzando los ensayos míos y asistiendo a los de él, fue más fácil. A mi papá lo conozco muy bien y ver cómo se iba desenvolviendo en las escenas me facilitó crear un mapa mucho más claro del personaje. Él ya tenía claro para dónde se iba a ir con el personaje, yo lo que hice fue mostrar lo que tenía para contar ese Mejía joven, pero también apegándome mucho a lo que mi papá tenía ya planteado.
¿Cuál es la diferencia entre el Mejía joven y el adulto?
La experiencia que adquiere Mejía adulto le da para manejar las situaciones y empieza a jugar una partida de ajedrez. Son personajes que tienen muchos matices, porque son humanos, no son buenos o malos. Al Mejía joven lo caracteriza el impulso, que hace que tome decisiones no tan acertadas, mientras que el mayor es más medido en cada decisión. Mejía sigue siendo el hombre que cuando quiere algo simplemente lo obtiene, pasa por encima del que tenga que pasar.
¿Cree que el tema de la política es atractivo para los colombianos en un momento como el que vivimos?
Como actores tenemos que hacer bien nuestro trabajo. Este es un personaje que tiene blancos, negros y grises. Muchos vamos a plataformas como Netflix, Amazon y Youtube como una manera de entretenernos ante este caos que se vive del coronavirus. Que esta producción trate del tema de la política justo en este momento, es mostrar que no desconocemos que hay políticos y seres humanos así en Colombia y en todos los países del mundo. En este caso la protagonista busca venganza, ya veremos cuáles son las consecuencias de su decisión.
¿Se dan consejos mutuos con su padre?
Mi papá para mí es el mejor actor de este país, de los mejores en Latinoamérica. Asume esto como un modo de vida, con un profesionalismo grandísimo, un respeto y una mística hacia la profesión que me hace admirarlo muchísimo como actor y persona. Lo chévere es encontrar ese punto en común de divertirse y aprovechar que compartimos esta profesión. Mi papá ve mi trabajo, yo veo el de él. Siempre tengo flores para él y a él le gusta mucho cómo asumo e interpreto cada personaje, creo que el orgullo es mutuo.
¿Y en esta ocasión quién dio las bases del personaje?
Mi papá tenía visualizado hacia dónde iba a dirigir el personaje, junto con los directores Camilo Vega y Lucho Sierra, sabíamos que le queríamos dar el lado oscuro de la política que no se cuenta y el lado oscuro que tenemos todos los seres humanos, porque todos vivimos momentos de oscuridad, en eso nos basamos más que en algún político.
¿Qué está enseñándonos este virus?
La vida y el universo nos están regalando otras cosas, yo la estoy pasando con mi hermano. Llegan momentos de desespero, de esperanza, de ganas de trabajar, de querer volver a la vida normal. Yo toco guitarra, piano, escribo. Pocas veces nos vemos obligados a estar con nosotros mismos. Es un momento que nos deberíamos dar siempre, para conocernos y conocer al otro.
Además pronto saldrá en El General Naranjo, ¿qué personaje interpreta?
Es uno de los lugartenientes del General, Leonardo Bustamante. Hace parte de los ‘cazadores’, que lo acompañará en todas sus peripecias.
¿Es cierto que se hizo unos ‘retoquitos’ estéticos o son chismes?
Solamente el cuidado que toca tener. Sí hubo una época en la que me adelgacé mucho y dijeron que me operé. Vos sabés que sacan chismes de todo.
Marlon Moreno
¿Qué lo entusiasmó de la historia de La Venganza de Analía?
Me pareció interesante interpretar la vida de un político, nunca lo había hecho y la escena que me pidieron en la audición hablaba de un hombre con mucho carisma y con una capacidad para envolver a todos.
¿Cuál es el perfil psicológico de Guillermo León Mejía?
Es una especie de psicópata, ambicioso de poder, cretino, mezquino, sin un solo valor positivo en la vida, que no lo quiere la esposa, no lo quieren los hijos, no lo quiere absolutamente nadie, pero parece que es un tipo que se ha hecho necesario para la política nacional.
¿Cuál fue su mayor reto al asumir este personaje?
Precisamente eso, no tener nada bueno como ser humano fue motivo diario de cuestionarme si existía una persona como esta, es más, todavía me lo sigo cuestionando.
¿Qué significa representar a un político corrupto en un momento donde la realidad supera la ficción?
La pregunta lo dice todo, nos quedamos en pañales ante lo que sucede en la realidad. Escribir historias de este tipo es bastante difícil porque siempre los noticieros nos revelan historias asombrosas, asquerosas acerca de estos personajes, pero pues aquí conocemos la vida intima de Guillermo León en casa, con sus amantes entonces de pronto esto puede ser motivo de atracción para el televidente.
¿Cuál es el sello diferencial de CMO Producciones?
Clara María Ochoa y Ana Piñeres de CMO se han caracterizado por hacer historias que tocan lo social, que hablan en estos últimos años del poder de la mujer, quien es la base de todo y quien mueve el poder en el mundo, y el que no lo acepte así está jodido.
¿Considera que faltan leyes en Colombia para evitar los feminicidios y el maltrato a la mujer?
No sé de leyes, pero si sé que el problema de la violencia intrafamiliar es también de mujeres a hombres y lo veo bastante. Cuando un hombre le pega a una mujer, toda la gente va y se mete, pero cuando una mujer le pega a un hombre, todo el mundo se ríe, es un tema para analizar, el mundo no está ni para feminismos, ni para machismos. Está para humanismo.
¿Y cómo fue su empatía con Carolina Gómez?
Máxima. Trabajar con Carolina ha sido maravilloso, además de ser una gran actriz es una gran persona, un ser humano muy generoso, muy bonita y pasamos unos meses muy chéveres compartiendo con ella y con el equipo.
¿Cómo fue el trabajo de ensamblaje del personaje con su hijo Brian?
Me alegra mucho que él lo haya hecho, porque está haciendo una carrera muy bonita, aún no hemos tenido el placer de trabajar juntos en una serie de televisión, y esta no cuenta porque como hacemos el mismo personaje, no compartimos escenas, pero compartimos en una película, Corazón de León y fue muy chévere.
¿Esta vez quién aconsejó a quién?
Yo generalmente no aconsejo nunca, porque pienso que dar consejos es como un síntoma de creerse superior, trabajamos el personaje, nos dimos ideas y lo sacamos adelante.
¿Qué le admira a su hijo?
Su tenacidad, su responsabilidad, su disciplina, su verraquera, es un actor con los huevos bien puestos.
¿Se basó en algún político real o en la suma de muchos?
Ya con la edad que tengo es uno de los personajes que uno tiene ahí en el saco de la vida, porque es lo que uno más ha visto en la vida, políticos corruptos.
¿Qué es lo que más ha extrañado del mundo exterior durante el aislamiento?
Todo. Vivir.
¿Cómo van sus proyectos de cine en Cali? ¿Vienen más proyectos en TV?
Ahí vamos... esperemos que pase rápido todo esto o cuando tenga que pasar y seguiremos adelante.
Y para televisión estoy haciendo mi propio contenido audiovisual, dirigiendo y produciendo.
¿Qué le ha enseñado este aislamiento?
A tener paciencia.
Productora
“Una tarde de botadera de corriente con mi socia Ana Piñeres sobre ideas para series, salió ese incidente donde asesinan a la madre de Ana Lucía y cómo desata en ella la necesidad de venganza. Pensamos en una estratega política porque representa el poder detrás del poder. Ella se convierte en una titiritera que tiene a su merced la vida y futuro político de su victimario”, dice la productora Clara María Ochoa.
CMO estaba rodando El Rey de la Montaña, ópera prima del director Camilo Vega (La Venganza de Analía), y ahora trabajan en tres películas y en la creación y escritura de cuatro series de televisión.