Cuando la directora de ‘Amalia’, la caleña Ana Sofía Osorio, escribió la historia de la película solamente pensó en una persona para que le diera vida al personaje de Elena: María Cecilia Botero.
“María C es una cara con la que todos los colombianos hemos crecido. No es una cara ajena. Además, es una persona extremadamente dulce y el personaje de Elena carece de esa dulzura, por lo que necesitaba a María Cecilia para que, desde su propio ser, le aportara un poco de felicidad al personaje”, dice Ana, y agrega que “ella nunca hizo casting, de hecho, yo siempre le comento a María Cecilia que el momento en que más he estado estresada y más nervios he tenido en la vida fue el día que la conocí”.
Ana es amiga del hijo de María Cecilia, Mateo. “Le conté a él que había escrito una historia para una película en la que su mamá era la persona perfecta para que interpretara un personaje. Él me dijo que me la presentaría y me llevó a su casa, conocí a María Cecilia y, mientras mis manos me temblaban, le pasé el libreto de la película. Ella me dijo que ocho días después me respondería. Sin duda, fue la semana más larga del
mundo”.
Esta directora caleña revela que justamente una semana después recibió la llamada de María Cecilia, “me llamó y me dijo que le gustó bastante el personaje porque tenía buen nivel de carácter”.
Los nervios de Ana Sofía momentos previos a conocer a María Cecilia no eran para menos, pues esta paisa de 63 años ha trabajado en telenovelas como ‘Lunes de comedia’, ‘Caminos de gloria’, ‘Cuando llega la noche’, ‘La rosa de los vientos’, ‘Lorena’, ‘Amas de casa desesperadas’, ‘Nuevo rico, nuevo pobre’, ‘Muñoz vale por dos’, ‘Secretos de familia’, ‘La bruja’, ‘La hipocondríaca’, ‘Las hermanitas Calle’ e ‘Hilos de sangre azul’, entre muchas otras.
Paralelo a su carrera como actriz de telenovelas, María Cecilia produjo y protagonizó varias comedias musicales dirigidas por su esposo, el argentino David Stivel, ya fallecido.
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Su sueño de popularizar el teatro musical en Colombia la llevó a realizar montajes muy importantes de la talla de ‘Peter Pan’, ‘Sugar’, ‘La mujer del año’, ‘La invencible Molly Brown’, ‘Música maestro’ y ‘Los caballeros las prefieren rubias’.
Como si fuera poco, también fue presentadora del noticiero CM&, condujo por varios años el programa ‘Día a Día’ del Canal Caracol junto a Catalina Gómez y Agmeth Escaf. Además, presentó dos ediciones del reality ‘Protagonistas de novela’.
Lo que pocos saben es que María Cecilia estudió antropología mucho antes de ser actriz, pues según ella “siempre había tenido curiosidad por conocer más sobre los seres humanos. En aquella época quería conocer cómo eramos, por qué somos lo que somos hoy en día y cómo hemos ido creciendo los seres humanos, respecto a las cosas buenas y malas que nos caracterizan”.
Además, confiesa que no es buena solo para una cosa: los negocios, pues “los artistas en general trabajamos más con el corazón que con la cabeza, y no somos tan prácticos como quienes se dedican a hacer negocios”, admite.
Hoy, en medio de una vida más “relajada”, a María C, como le dicen sus amigas o familiares más cercanos, le queda un poco más de tiempo para ver televisión y dedicarse tiempo para sí misma.
“No soy de sentarme seis horas a ver diez capítulos seguidos de una serie. Soy de las que veo un capítulo de una producción y no tengo problema con sentarme, ocho días después, a ver el siguiente episodio. Yo no tengo esa urgencia que tienen los jóvenes hoy en día”, cuenta María Cecilia, quien se declara una mujer “fresca”.
Sobre la transformación de las maneras de hacer televisión considera que hoy en día estamos en un momento de mucho cambio, sobre todo los temas relacionados con las comunicaciones. “Ahora existen plataformas, los chats, la inmediatez de internet y es una transición muy fuerte la que nos está tocando vivir y la televisión no ha sido ajena a esta realidad”.
“Hoy nadie espera a que sean las 8:00 p.m. para sentarse en familia a ver una serie, pues cada uno se la ve en su cuarto y a distintas horas. Eso nos distancia a todos”, finaliza.
Amor para todos
Mateo, hijo de María Cecilia, explica que el consejo que ella siempre le dio cuando era niño fue que “estuviera muy enfocado en mi profesión y que la debía respetar por encima de todas las cosas. También me decía que en cualquier circunstancia debía ser siempre buena persona, pues eso era lo más importante para ella. Hoy le agradezco esos consejos enormemente”.
Este director de televisión, que vivió varios años en México, le cuenta a El País que a su mamá le admira muchas cosas, pero “sobre todo el temple que tiene. Recuerdo en las épocas de comedias musicales la perseverancia y persistencia que tenía. Por nada del mundo se dejaba amedrentar”, y agrega que la relación con María Cecilia es maravillosa y actualmente vive con ella.
“Este, y como en los anteriores días de la madre le debo decir que la amo profundamente y que me siento muy orgulloso de la mamá que tengo”, sostiene Mateo, hijo del argentino David Stivel, con quien María Cecilia tuvo una relación de once años.
“Si medimos este tiempo ahora podemos concluir que fue un poco corto, pero lo cierto es que fueron años maravillosos de los que quedaron buenos recuerdos y un hijo espectacular. David Stivel fue mi maestro en muchas cosas de la vida”, ha manifestado María Cecilia en varias oportunidades.
En el 2013, en una entrevista a este medio reconoció que de David la enamoró “todo: su alegría, la inteligencia, su rigor y su disciplina en el trabajo; los detalles, porque era muy detallista y amoroso conmigo. Pero la primera imagen de él es su risa, que contagiaba a todo el mundo. A mí me encanta la gente alegre que tiene ganas de vivir y él la tuvo hasta el último momento”
David era argentino, pero vivió muchos años en Colombia, país en el que dirigió cuatro programas semanales de televisión, entre ellos ‘Cita con Pacheco’, ‘Compre la Orquesta’, y ‘¡Cuidado con las Mujeres!’.
Es por este motivo que María Cecilia cree que su hijo Mateo heredó la pasión por las cámaras y los sets de grabación. “Sin duda él se vio influenciado porque tuvo un papá que cambió la televisión en Colombia y, como yo era actriz, creció en este mundo artístico. Recuerdo que me lo llevaba desde pequeño al estudio, a los teatros y a las giras por distintas ciudades. Yo ya sabía que Mateo se iría por algún lado del mundo artístico. Esta pasión la llevaba en los genes”.
Reconoce que todos los días le da gracias a Dios porque tiene un hijo “maravilloso, inteligente, sensible, amoroso, juicioso, profesional y comprometido con su trabajo”.
Tras la muerte de David, María Cecilia tuvo una relación que duró casi 20 años y que terminó a comienzos de 2016, por lo que ella dice que es una prueba de que le gustan las relaciones estables.
Eso sí, otra de las relaciones duraderas que ha tenido María Cecilia es con el chocolate: “Me puedo comer la caja grande de chocolates en pocos minutos. Lo peor es que no me hostiga”.
A pesar de que se le ve tan vital, el fin de semana pasado se conoció, por medio de un canal de televisión nacional, que María Cecilia hace muchos años padeció una oclusión intestinal que la tuvo al borde de la muerte, pero el amor por su hijo la hizo luchar para mantenerse con vida.
“Me operaron y ocho días después salí de la clínica, me quitan los puntos, pensé que me iba a curar, pero se presentó otra oclusión intestinal, por lo que debí someterme a una nueva cirugía de más de ocho horas. Cuando estaba en recuperación se me taparon todas las entradas de oxígeno a los pulmones y me morí. Me acuerdo estar arriba de todo viendo lo que hacían los médicos conmigo. Alcancé a pensar que si era la hora de morirme, pues no había nada que hacer, pero de un momento a otro pensé que no le podía hacer eso mi hijo, pues un año atrás se le había muerto el papá. Después amanecí en cuidados intensivos”, le contó al programa La Red.
Hoy, años después de este episodio y mucho más tranquila, tiene su lista favorita de actividades para hacer en el tiempo libre y así evitar estresarse. “Me gusta ver televisión y pintar un poco para relajarme.
También disfruto leer y amo escuchar música. Quisiera pasar mis últimos años haciendo todas estas actividades y durmiendo, porque me encanta dormir. Además, deseo comer sin pensar si me voy a engordar o no”.
Finalmente, explica que escucha varios tipos de música, pero todo depende del estado de ánimo en que se encuentre. “Si estoy contenta escucho música alegre. No me gusta mucho el vallenato, pero una salsa de vez en cuando no cae mal”.