La noticia de su muerte conmocionó al mundo, Michael Jackson, de 50 años, estaba preparando todo para la que sería su nueva gira mundial ‘This is it’, pero aquejado por insomnio y agotamiento empezó a abusar de ansiolíticos y benzodiacepinas, administradas sin precaución por su médico Conrad Murray, causando la inesperada muerte de la superestrella de la música, quien no resistió la última dosis y murió de un paro cardíaco.
Durante los primeros días posteriores a su muerte, se manejaron toda clase de teorías, como que había sido un suicidio del artista para vender más discos y dejar a su familia libre de deudas, o que lo había mandado a asesinar el dueño de una disquera, incluso que una secta llamada Los Illuminati había conspirado para acabar con su vida por las denuncias de abuso sexual que tenía Jackson.
Pero, dos años después, en 2011, un tribunal de Los Ángeles, condenó al cardiólogo Conrad Murray como responsable de la muerte del artista, en lo que sería un homicidio involuntario. El hecho fue que Murray, de forma irresponsable, administró una sobredosis de anestésicos a Jackson.
En su libro ‘Conspiraciones, mitos y leyendas en la historia de la música’, el periodista musical Manolo Bello, explica que “Conrad Murray —de quien los promotores de la gira desconfiaban—, empezó a darle medicamentos restringidos para que pudiera conciliar el sueño, pero aun así Michael no dormía. Murray aumentó las dosis hasta que el Rey del Pop murió”.
No obstante, en la actualidad hay personas que niegan la muerte de Michael Jackson y afirman que todo fue un montaje para que el artista ganara más dinero, pagara sus deudas y pudiera llevar una vida en el anonimato, después de fingir su muerte.
Lo cierto es que desde su fallecimiento, Michael Jackson se convirtió en el artista muerto que más dinero genera, para el año 2016, la revista Forbes registró el tope más alto en la historia, 825 millones de dólares facturó el extinto Rey del Pop, puesto que mantuvo de forma consecutiva hasta el 2020.
En vida, Michael Jackson fue protagonista de varios escándalos, entre ellos, dos denuncias por abuso sexual a menores de edad. Primero, en 1993 fue acusado por la familia de un pequeño bailarín que había compartido tiempo con Jackson en su rancho Neverland, el padre del menor interpuso la acción legal, pero se concilió en la corte y el artista tuvo que pagar una suma desconocida de dinero, que algunos afirman fue superior a los 20 millones de dólares.
Poco después, Jackson fue nuevamente acusado por la familia de otro menor que había estado en Neverland. Pero este caso, sí llegó a un juicio muy mediático en 2005, el que se terminó declarando a Jackson no culpable que, como aclara Bellon en su libro, “que no es lo mismo que declararlo inocente”.
“La declaración de no culpable deja implícito que no se pudo demostrar irrevocablemente que los hechos investigados no hayan ocurrido; es decir, la Fiscalía no fue capaz de probar la culpabilidad más allá de toda duda”, agrega el periodista.
Otro mito sobre el artista recae en su impresionante cambio de apariencia, puesto que siendo afroamericano, a lo largo de su vida fue evidente cómo cambió el color de su piel. Mucho se dijo sobre que se realizó extraños tratamientos para ser blanco, porque se sentía avergonzado de ser negro, pero en una entrevista con Oprah Winfrey reveló que sufría de vitíligo, una enfermedad autoinmune que despigmenta la piel, y que le habían diagnosticado desde 1986.
Nada de todo lo anterior, impidió que Michael Jackson rompiera todos los récords de ventas con extraordinaria producción musical, entre los que se cuentan álbumes como ‘Thriller’ (1982) y ‘Bad’ (1987), entre otros, con lo que logró vender más de 400 millones de copias en todo el mundo, por lo que es considerado “el artista más exitoso de todos los tiempos”.