En la búsqueda constante de equilibrio y armonía en sus vidas, muchas personas recurren al Feng Shui, una antigua disciplina china que se centra en la organización y distribución de los espacios para mejorar la energía vital o “chi”. Uno de los aspectos menos conocidos del Feng Shui es su recomendación de evitar tener objetos guardados debajo de la cama. En este artículo, se explorará por qué el Feng Shui desaconseja esta práctica y cómo se puede mejorar la energía en el dormitorio.
¿Qué es el Feng Shui?
El Feng Shui, una antigua disciplina china, es el arte de organizar y diseñar espacios para mejorar el flujo de energía vital o “chi”. Se basa en la creencia de que la armonía en el entorno tiene un impacto directo en la calidad de vida y el bienestar.
Este sistema se centra en la distribución adecuada de elementos, colores y objetos para equilibrar la energía en el hogar o cualquier espacio, con el objetivo de promover la salud, la prosperidad y la armonía en todas las áreas de la vida.
El significado de tener objetos bajo la cama según el Feng Shui
El Feng Shui considera que los espacios en el hogar son un reflejo del estado emocional y mental de las personas, y el dormitorio, en particular, es un área crucial para el bienestar. Según esta antigua filosofía china, la energía fluye a través de cada espacio, y la acumulación de objetos bajo la cama puede obstaculizar este flujo. A continuación, se presentan algunas razones por las cuales se desaconseja tener cosas debajo de la cama según el Feng Shui:
- Bloqueo del flujo de energía: El espacio bajo la cama es considerado una zona de almacenamiento de energía vital. Colocar objetos debajo de la cama puede bloquear el flujo de energía, lo que podría tener un impacto negativo en el equilibrio emocional y la calidad del sueño de quienes duermen en ella.
- Acumulación de polvo y desorden: El espacio bajo la cama tiende a acumular polvo y suciedad, lo que puede crear un ambiente poco saludable en el dormitorio. Además, la acumulación de objetos puede llevar al desorden, lo que a su vez puede generar estrés y ansiedad.
- Cargas emocionales: El Feng Shui sostiene que los objetos tienen energía propia y pueden llevar consigo cargas emocionales. Guardar objetos con recuerdos negativos o asociaciones emocionales debajo de la cama podría tener un impacto negativo en la paz y la tranquilidad en el dormitorio.
Consejos para armonizar la energía en el dormitorio según el Feng Shui
Ahora que se comprende por qué el Feng Shui desaconseja tener cosas guardadas debajo de la cama, es importante considerar cómo se puede mejorar la energía en el dormitorio. A continuación, se presentan algunos consejos basados en el Feng Shui para armonizar el espacio y promover el bienestar:
- Mantener el espacio bajo la cama despejado: El primer paso consiste en liberar el espacio bajo la cama de objetos y desorden. Esto permitirá que la energía fluya libremente y reducirá la acumulación de polvo y suciedad. Se pueden utilizar cajas de almacenamiento adecuadas si es necesario, pero es fundamental asegurarse de que estén limpias y organizadas.
- Elegir colores y materiales adecuados: Según el Feng Shui, los colores y materiales en el dormitorio pueden influir en la energía del espacio. Se debe optar por colores suaves y relajantes, como el azul o el verde, y utilizar materiales naturales como la madera y el algodón para crear un ambiente armonioso.
- Evitar espejos frente a la cama: Los espejos frente a la cama se consideran desfavorables en el Feng Shui, ya que pueden reflejar la energía y perturbar el sueño. Si se tienen espejos en el dormitorio, es importante asegurarse de que no reflejen la cama mientras se duerme.
- Agregar elementos equilibrantes: Se deben incorporar elementos que promuevan el equilibrio y la armonía, como plantas vivas, obras de arte inspiradoras y objetos personales que hagan sentir bien. Estos elementos pueden elevar la energía del espacio y mejorar el bienestar general.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.