Después de la baja audiencia durante la pandemia, con apenas unos 10 millones de espectadores, que llevó a algunos a pensar si realmente transmitir la gala era relevante en la era de TikTok, las audiencias regresaron con fuerza el año pasado con 18,7 millones.

Parte del éxito fue atribuido al aplaudido regreso de Jimmy Kimmel como anfitrión, quien estará también este domingo, en su cuarta vez al frente del fastuoso espectáculo.

“Siempre soñé con ser anfitrión de los Óscar exactamente cuatro veces”, bromeó Kimmel en un comunicado emitido por la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas y por la cadena ABC.

Los productores ejecutivos de los Óscar, Raj Kapoor y Katy Mullan, elogiaron a Kimmel como “uno de los mejores anfitriones de los Óscar de todos los tiempos”, destacando su “mezcla perfecta de humanidad y humor”.

Jimmy Kimmel en un show de baile en la gala 95 de los Premios. | Foto: Restringido

“Creo que es realmente importante recordarle a alguien todos los obstáculos antes de aceptar un trabajo tan grande y, la verdad, ingrato. Así que ¡siempre intento convencerle de que no lo haga!”.

El humorista se entusiasmó con regresar, en parte por su deseo de celebrar el fin de las masivas huelgas de Hollywood el año pasado, que deben figurar en su monólogo de apertura.

La primera vez que Kimmel animó el Óscar culminó con la infame mezcla de sobres, tras la cual, por error, ‘La La Land’ fue anunciada como mejor película, premio que en realidad fue para ‘Luz de luna’.

Kimmel recientemente dijo que espera que ocurran algunos momentos imprevistos y espontáneos el domingo.

“Ahí es cuando Jimmy realmente brilla. Él está cómodo en la incomodidad”, agregó su esposa. “Me encanta que Jimmy dice que espera que algo salga mal”, ella dijo. “Realmente espero que nada salga mal”.

Kimmel es ampliamente aceptado como un fichaje seguro, especialmente luego del incidente de 2022 en el que Will Smith abofeteó a Chris Rock por hacer un chiste sobre su esposa.

Los niveles de audiencia en televisión de los Óscar aumentaron por segundo año consecutivo, con 18,7 millones de televidentes en la gala más reciente.

Este año, Hollywood también está luchando por recuperarse de las primeras huelgas de actores y escritores en 60 años, que paralizaron a la industria durante meses.