El 29 de febrero, conocido como el “día adicional” en el calendario, es a menudo visto como un momento peculiar, asociado con supersticiones y creencias sobre la mala suerte. En este día, algunas personas sienten que están más propensas a enfrentar contratiempos y desafíos inusuales. Sin embargo, para aquellos que buscan contrarrestar esta creencia arraigada, existe un ritual especial que promete desbloquear la mala suerte y atraer energías positivas.

El ritual milenario

Este ritual, que se remonta a tiempos antiguos, ha sido transmitido a través de generaciones como una forma de enfrentar los desafíos asociados con el 29 de febrero. Se cree que su práctica puede disipar las influencias negativas y abrir el camino hacia nuevas oportunidades y fortuna.

Los elementos necesarios

Para llevar a cabo este ritual, se necesitan ciertos elementos específicos que actúan como herramientas para desviar la mala suerte. Entre estos se incluyen:

Para aquellos que buscan un respiro de las influencias negativas del día extra, este ritual ofrece una oportunidad para renovar la esperanza y la positividad. | Foto: Getty Images
  • Hierbas de protección: Se recomienda el uso de hierbas como la salvia, el romero o la ruda, conocidas por sus propiedades de protección y purificación.
  • Velas: Las velas de colores vibrantes, como el rojo o el amarillo, se utilizan para invocar energías positivas y eliminar cualquier negatividad presente.
  • Agua o esencias sagradas: Estos elementos se emplean para purificar el espacio y alejar cualquier influencia negativa que pueda estar presente.
  • Objetos personales: Se anima a los participantes a llevar consigo objetos personales que representen la fortuna y la prosperidad, como amuletos de la suerte o joyas de valor sentimental.

Procedimiento del ritual

El ritual se lleva a cabo en un ambiente tranquilo y privado, preferiblemente en la mañana del 29 de febrero. Los participantes deben seguir los siguientes pasos:

En medio de las creencias arraigadas sobre la mala suerte del 29 de febrero, surge un ritual ancestral que promete contrarrestar estas influencias negativas. | Foto: Getty Images
  • Preparación del espacio: Se selecciona un espacio tranquilo y se limpia física y energéticamente con hierbas de protección y agua bendita.
  • Encendido de velas: Se encienden las velas elegidas, invocando energías positivas y eliminando cualquier influencia negativa en el ambiente.
  • Oraciones o mantras: Se recitan oraciones o mantras que promuevan la prosperidad y la buena fortuna, mientras se concentran en la intención de desbloquear la mala suerte.
  • Ofrendas: Se pueden realizar ofrendas simbólicas, como frutas o flores, como muestra de gratitud hacia las fuerzas que guían y protegen.
  • Cierre del ritual: Una vez completado, se agradece a las fuerzas superiores y se apagan las velas, finalizando el ritual con una sensación de renovación y esperanza.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.