La plata es uno de los materiales que más se ha usado en la historia en plumas, vasijas, cubiertos, platos, relojes, anillos y todo tipo de objetos. Junto a piedras preciosas, son trabajadas por orfebres, creando verdaderas obras de arte. Gracias a su precio, más asequible que el oro, la plata se ha convertido en uno de los metales más apreciados en joyería.
Actualmente, puede llegar a ser más común encontrarlas en joyería, lo cierto es que la plata es más fácil de adquirir, monetariamente hablando, pero, aun así, representa un gasto considerable para los usuarios.
Por eso, para identificarlas correctamente y no dejarse engañar, existen distintos métodos con los que se podrá salir de dudas acerca de su veracidad. Aunque algunas de estas fórmulas son consideradas invasivas, todas ellas servirán para descubrir de forma rápida y sencilla que las joyas son realmente de plata.
Marca de autenticidad: Buscar marcas o sellos en la joya que indiquen que es de plata. Por lo general, las joyas de plata genuina tienen grabada la marca “925″ o “Sterling Silver”, lo que significa que contienen un 92.5% de plata pura. Esta marca garantiza la autenticidad de la joya.
Prueba del imán: La plata no es magnética, por lo que se puede usar un imán para verificar si una joya es auténtica. Si la joya es atraída por el imán, es probable que no sea de plata genuina. Sin embargo, esta prueba no es concluyente, ya que algunos metales no magnéticos también pueden ser plateados.
Prueba de la nitidez: La plata genuina es un metal blando y maleable. Se puede intentar hacer una pequeña marca en un área discreta de la joya con una herramienta afilada. Si deja una marca clara y profunda, es probable que la joya no sea de plata genuina, ya que la plata es más suave y se raya con mayor facilidad.
Prueba de la densidad: La plata tiene una densidad relativamente alta en comparación con otros metales. Puedes sumergir la joya en agua y observar si se hunde o flota. Si la joya es de plata genuina, debería hundirse debido a su mayor densidad.
Técnica del cubo de hielo: Se puede colocar un cubito de hielo sobre el objeto. Si se derrite rápidamente, el objeto es de plata, pero si el cubito permanece inalterable será de alpaca.
Consejo para conservar las joyas de plata
- Limpie sus joyas de plata regularmente utilizando un paño de limpieza de plata o un paño suave y sin pelusa. Evite usar productos químicos agresivos, ya que pueden dañar la plata.
- Almacene sus joyas de plata en un lugar fresco y seco, preferiblemente en una bolsa de tela suave o en una caja de joyería forrada con tela. Esto ayudará a prevenir la oxidación y el desgaste.
- Evite el contacto directo de tus joyas de plata con productos químicos como perfumes, lociones, cloro y productos de limpieza. Estos pueden causar decoloración y daños en la plata.
- Retire las joyas de plata antes de nadar, ducharte o realizar actividades físicas intensas. La exposición al agua y al sudor puede acelerar el proceso de oxidación de la plata.
- Si notas que tus joyas de plata están perdiendo su brillo, puedes utilizar un limpiador de plata específico o un remedio casero como una pasta de bicarbonato de sodio y agua para restaurar su lustre. Frota suavemente la pasta sobre las joyas con un paño suave y enjuaga con agua tibia.
- Si tienes joyas de plata con piedras preciosas, evita sumergirlas en agua o limpiadores de plata, ya que esto puede dañar las piedras. En su lugar, límpialas con un paño suave y húmedo.
- Si tus joyas de plata están muy sucias o dañadas, considera llevarlas a un joyero profesional para que las limpien o reparen adecuadamente.