Aladdín, la nueva versión de la película animada que se estrenó en 1992, ha sido el mayor éxito de la vida actoral de Will Smith, quien interpreta al ‘Genio’. Así lo reconoció entre lágrimas el pasado jueves el actor cuando publicó en su Instagram un video donde agradece a sus más de 34 millones de seguidores el haber convertido a su más reciente largometraje en la película más taquillera de toda su carrera.

“¡Aladdín se convirtió en la película más grande de mi carrera! Me siento honrado y sin palabras. Lo único que puedo decir es ... Gracias”, es el mensaje con el que acompañó el video.

Y es que este 'remake', que está dirigido por Guy Ritchie, quien ha hecho otras películas taquilleras mundialmente como Snatch y Sherlock Holmes, triunfó desde su primer fin de semana de estreno a finales del mes de mayo: tan solo en Estados Unidos, la cinta recogió en los dos primeros días 86, 1 millones de dólares. Richie, al dirigir esta versión, se ha sumado a muchos otros cineastas alrededor del mundo que le han apostado a hacer versiones de los clásicos animados de Disney, como Cenicienta, La bella y la bestia, El Rey León o Dumbo, pero con personajes de carne y hueso.

Sobre sus primeras impresiones de cuando le ofracieron hacer el papel del Genio, Smith, quien en los 90 interpretó al recordado Príncipe de Bel Air (The Fresh Prince), ha comentado que estaba “aterrorizado. Es como si me hubieran pedido hacer el papel de Al Pacino en El Padrino (1972)”.

Además, confesó que lo que más le asustó de hacer al Genio fue la idea de competir con la interpretación que en los 90 hizo el actor Robin Williams, quien le dio vida al Genio, papel con el que se ganó un Globo de Oro: “Williams revolucionó lo que se podía hacer en una película de animación al marcar a toda una generación cuando dobló al Genio”, dijo Smith.

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Sin embargo, el actor encontró la seguridad en la música, más concretamente en la canción ‘Friend like me’ (Un amigo como yo), la cual se fusiona con algunos ritmos del hip-hop.

“Cuando llegué al estudio estaba preocupado acerca de cómo podía dejar mi huella en la obra. Entonces, pensé en ‘Friend like me’ y trabajé desde ahí para no solo intentar captar a la audiencia, sino también para aportar algo de mi personalidad y poderlo llevar al personaje del Genio”, dijo Will Smith también ha comentado sobre Aladdín que antes de rodar la película se tomó un par de años para estar con su familia y “meterme en un viaje espiritual. Antes de mi receso, me llegué a sentir esposado por mí mismo. Pensé que ya había llegado a un tope de mi creatividad y de los personajes que podía ofrecer”.

Es así como este largometraje renovado de Disney se convirtió en una especial oportunidad en la que Smith pudo involucrarse de nuevo realmente en la actuación y encontrar, de alguna manera su lugar en el mundo: “Me di cuenta de que en esta nueva etapa de mi vida todo debe comenzar con preguntarme sobre lo que le quiero decir al mundo, y en ese orden de ideas me pregunté cosas como: ¿este nuevo proyecto contribuye a la familia humana?, ¿puedo ir por el mundo con las ideas que la película representa? Aladdín cruza todas estas casillas de preguntas con un sí”.

Lo que también le atrajo al artista sobre la posibilidad de interpretar al Genio, es que en esta nueva versión de Aladdín la diversidad iba a verse en la pantalla grande, no en vano el papel de Aladdín es interpretado por el actor egipcio-estadounidense Mena Massoud, poco conocido en la industria cinematográfico, circunstancia que para nada ha jugado en contra del éxito de la cinta.

“Creo que Aladdín representa un movimiento que ha surgido en Hollywood y que demuestra que cualquier grupo étnico puede liderar una película”, dijo Smith, quien ha dejado ver su inconformidad por la falta de diversidad en los contenidos de Hollywood, como lo hizo en los Premios Óscar del 2016, a los que no asistió aduciendo que “somos parte de esta comunidad. Pero en el momento actual nos sentimos incómodos de estar ahí y decir ‘esto está bien’”.

En cuanto a la princesa Jasmine, interpretada en esta versión por la actriz Naomi Scott, y que es presentada como una mujer dueña de su destino y con voz propia, el artista ha expresado que “es ridículo que una mujer no pueda ser sultana”, en alusión a una de las trabas a las que debe enfrentarse la princesa Jasmine en la cinta.

“Disney añade una brillante historia de Jasmine que aporta un toque moderno a la cinta en la que aparece una princesa que quiere gobernar Agrabah y que tiene que luchar desde su posición para conseguirlo”, expresó Smith al tiempo que mencionó en especial la fortaleza de la canción ‘Speechless’, que canta Jasmine en la película.

Este tema, que significa ‘Sin la palabra’, se consolida como un símbolo del empoderamiento femenino al hablar sobre la independencia y el deseo de una sucesora inteligente y fuerte que quiere convertirse en sultana.
Smith ha dicho que se deben seguir haciendo producciones como Aladdín con el fin de “ofrecer oportunidades a todas las personas y continuar defendiendo la igualdad y la inclusión”.

Casado dos veces

Willard Carroll Smith es su nombre de pila, tiene 50 años y nació en Filadelfia, Pensilvania, Estados Unidos. Además de ser actor, también tuvo un corto paso por el mundo de la música como rapero cuando cantaba bajo el nombre The Fresh Prince, también se ha desempeñado como productor de cine y televisión en varias ocasiones.

Su vida cambió drásticamente cuando en 1990 protagonizó la serie por la que muchos lo recuerdan aún: El Príncipe del Rap. Desde entonces ha hecho muchos largometrajes, Y entre los que más recuerdan sus fanáticos están Hombres de Negro, En Busca de la Felicidad, Soy Leyenda, Yo Robot, Los Ilusionistas, El Día de la Independencia y La Verdad Oculta.

Es una persona amable y sencilla, según impresiones de periodistas que pudieron verlo en su paso por Cartagena en mayo del año pasado mientras grababa la película ‘Gemini Man’, tiempo que también aprovechó para bailar reguetón y champeta, y probar platos típicos colombianos.

Al igual que Smith, su familia no ha estado lejos de las cámaras y el mundo del espectáculo. Trey Smith, quien es el hijo que tuvo con su primera esposa Sheree Zampino, también es actor.

Con su segunda y actual esposa, Jada Pinkett, con la que lleva más de 20 años de matrimonio, tuvo a sus dos hijos menores, Jaden y Willow Smith, quienes se han desempeñado como artistas dentro de la actuación y la música.

Sobre su relación con Pinkett, Smith ha comentado que no les gusta usar los términos “esposo o esposa”, sino por el contrario “compañeros de por vida”.

“No hay más. No hay nada que pueda hacer. Nada que rompa nuestra relación. Ella tiene mi apoyo por el resto de mis días y me siento muy bien en este sentido”, dijo Smith.

El lunes de la semana pasada Smith y su esposa brindaron apoyo en sus redes sociales a su hija Willow, luego que ella afirmara querer tener relaciones poliamorosas.

Los críticos hablan

Como un muchacho que llegó en el momento en el que la televisión y el cine necesitaban una figura fresca y juvenil, ven algunos críticos de cine, como Jaime Ponce, la incursión de Will Smith al mundo de Hollywood.

“Ha sido una persona que desde el comienzo demostró que tenía un talento especial para actuar y hacer lo que se propusiera. Lo demostró cuando comenzó en el Príncipe del Rap, la serie que realmente lo catapultó a la fama. En ella demostró su capacidad para lograr mucho más”.

Además, es un artista polifacético y, comenta Ponce, eso, de entrada, hace que los reflectores siempre estén sobre él: “llama siempre la atención porque es actor, músico, productor de cine y televisión. Es un tipo que vive muy actualizado y conectado con la gente joven y esa imagen le ha permitido mantenerse. Tan es así, que cuando uno ve Aladdín es él el que se roba el show totalmente”.

Smith es afroamericano, y para Ponce, esa particularidad le ha ayudado para ser un ejemplo para muchos que, como él, quieren llegar a la meca del cine comercial, o para hacer activismo a favor de las minorías y mujeres.

“Si bien es una tendencia todas esas posturas que los famosos toman sobre las minorías y el empoderamiento femenino, Smith encaja muy bien con ese tipo de activismo, pues es un hombre que tiende a ser muy sociable, eso se reflejó incluso cuando vino de visita a Colombia. Es muy dado a la gente, nada complicado, muy fresco, que no le pone misterio a la vida, y eso es lo más importante, que como actor se convierta en líder, y cuando convoca este tipo de activismo, a él siempre le queda muy bien eso”.

Por otra parte, Juan Carlos Romero, docente de la Universidad Autónoma de Occidente y crítico de cine, dice que si bien el recorrido artístico de Smith no puede ser demeritado, pues “debió hacerse a pulso como cualquier otra persona”, sí advierte que la presencia del actor en Hollywood no representa una ganancia para la comunidad afroamericana o para las minorías: “quisiera pensar que sí, pero cuando uno mira el comportamiento cinematográfico a él no lo veo como un líder”.

“Un actor de este calibre factura unos casi 30 millones de dólares por proyecto, eso le da una estabilidad económica descomunal e incluso la capacidad monetaria para mantener a las próximas tres generaciones de su familia, por eso siempre siento que ellos están ahí como parte del juego manipulador de una sociedad que es profundamente racista como la norteamericana”.

Romero comenta que esos momentos de lucidez activista en los que eventualmente se le ha visto a Smith, como cuando habló de la urgencia de seguir creando producciones en las que se les dé más participación a las mujeres, o cuando dejó de asistir a la gala de los Premios Óscar en el 2016 por la falta de diversidad en los contenidos cinematográficos, no son genuinos sino más bien oportunistas.

“Ese tipo de actitudes son más ganar indulgencias con camándula ajena que una postura real. Si uno compara la filmografía de Will Smith, con rarísimas excepciones, va a encontrar discursos o posturas contrarias frente a lo que él está diciendo. Cuando uno ve a Smith ve a un hombre que se sube a la cresta de la ola y dice lo que es políticamente deseable que alguien diga en algún momento”.

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