Por Isabel Peláez R., Editora de cultura y entretenimiento de El País

El Gobierno de Cali cumplió su deuda con Guayacán Orquesta, al rendirle un homenaje a esta emblemática agrupación en la apertura y, hoy, desde las 4:00 p.m., al cierre de la Feria de Cali 66, en el Parque de las Banderas. “Estamos celebrando 35 años de trayectoria y cumpliendo 37, porque la pandemia no nos permitió festejarlos”, le dijo a El País el maestro Nino Caicedo, quien adelantó que tiene listas composiciones que ni el propio Alexis Lozano conoce aún.

Luego de la Feria estarán en Estados Unidos, en enero, y volverán a Colombia para estar en el Carnaval de Barranquilla y posteriormente viajarán a Ecuador.

Nino Caicedo, artista de Guayacán Orquesta. | Foto: El País

¿Cómo inicia su historia en Guayacán?

Yo siempre he estado en Guayacán, porque con Alexis nacimos en Quibdó (Chocó), con una casa de por medio, en la misma calle. Desde que nos conocimos hicimos música, jugamos, hablamos, crecimos juntos. Luego me voy a Bogotá a terminar el bachillerato y a hacer la carrera profesional. Después llega Alexis allá. Yo estuve desde la génesis de Guayacán, asesorándolo, ayudándolo con lo que podía, porque hemos sido muy unidos. Ya como compositor, las primeras canciones aparecieron en 1989.

¿Cómo fue esa infancia de suya y de Alexis Lozano, rodeados de ese ambiente musical en el Chocó?

Nacimos en Quibdó, a orillas del río Atrato, en la Calle 13 entre carreras 6 y 5. Esa calle ahora es la 29, pero es el mismo barrio Cesar Conto; desde el vientre materno escuchamos la música folclórica, los tambores, el clarinete, el bombardino, esa música autóctona que hasta el día de hoy está más cimentada y conoce toda Colombia. Crecimos conociendo estas canciones, somos herederos de una pléyade de músicos empíricos que aprendieron a tocar instrumentos sin tener mucho conocimiento teórico, y empezamos a tocar la guitarra, a cantar en las calles llevando serenatas a las novias, a la familia. Alexis entra a estudiar la gramática musical y todo lo que necesitaba para desarrollarse como director, arreglista e instrumentador a la escuela de la Catedral de Quibdó, con el padre Isaac Rodríguez, sacerdote español. Yo estaba en Bogotá, estudiando ingeniería. Alexis se va a la Universidad Nacional de Bogotá, estudia unos semestres allí, pero él quiere hacer música comercial y se siente listo, trabaja como arreglista.

¿Pero antes del reencuentro entre ustedes, sucede otro encuentro entre Alexis Lozano y Jairo Varela?

Alexis se encuentra primero con Jairo (Varela), paisano nuestro, y Jairo fue un gran compositor, como todos sabemos, pero no tenía el conocimiento de la música propiamente dicho. Alexis, junto a Jairo, crean el Grupo Niche. Alexis Lozano y Jairo Varela son los creadores del Grupo Niche. Alexis es el arreglista, el director musical, y, cuando graban los primeros discos, él toca varios instrumentos. Pero en la cuarta o quinta producción del Grupo Niche Alexis Lozano decide retirarse de la agrupación y hacer Guayacán. Aún no tiene músicos que estén bien fundamentados, regresa al Chocó y busca la familia Valdez, hijos de músicos: Julio, William y Riche Valdez y busca a otros chicos como integrantes de la escuela que piensa hacer, porque ya no solamente tiene conocimiento teórico sino mucha práctica, ha andado por el mundo.

En 1982 comienza a formarlos y cuando siente que los pelados están listos, en 1986, hace una grabación y la presenta a las disqueras, se llamó: ‘Llegó la hora de la verdad’. Graban otras dos y en 1989 me dice, de nuevo, que le escriba canciones. Ese año escoge las dos primeras mías, Cocorobé y La Más Bella, y de ahí para allá, ya es historia.

Por eso las historias de Guayacán y el Grupo Niche están ligadas y ambas son amadas por los caleños. ¿Pero cómo es la relación entre ustedes, quienes las integran?

Necesariamente ligadas (risas). Muy buena pregunta. Las diferencias que hubo con Jairo, que en paz descanse, fue en una época, y en los últimos años de Jairo volvimos a ser grandes amigos. Jairo viene de una generación mayor, pero, como paisanos, Alexis y yo lo conocimos en Bogotá, después hubo una competencia que nos distanció un poco, pero era una cosa bonita, mirándola desde hoy, era netamente musical. Al irse Jairo, nos dolió mucho y esa competencia desapareció. No era que cruzábamos calle cuando nos encontrábamos, siempre nos saludábamos, y Jairo tenía la costumbre, cada vez que se encontraba conmigo, que me empezaba a enseñar cosas, me contaba anécdotas muy bonitas, sus luchas, sus triunfos, no sé cuál era su objetivo, pero siempre lo hacía. Al irse Jairo, tomaron la batuta los herederos, los hijos, y esa discrepancia de parte de nosotros no existe, y creo que de parte de los muchachos tampoco. Han aparecido personas ajenas que creen que hay una guerra, pero nosotros solo cariño por el grupo de nuestro amigo. Las personas que han trabajado en Guayacán tienen la orden de no estarse fijando qué hace otra agrupación. Yo no sé qué publica el Grupo Niche en sus redes sociales, nunca he entrado y Alexis jamás, todo lo que hacemos es producto de nuestra creatividad y lo que sentimos en nuestro corazón. Siempre hemos escrito en papel original, nunca en papel copia. Ni siquiera por haber sido Alexis el primer arreglista en el Grupo Niche, que tiró las bases de la agrupación, el sonido de Guayacán se parece al de Niche, y él había podido copiarlo, porque es el papá. Cali Pachanguero no se parece en nada a Oiga, Mire, Vea.

Nino Caicedo, artista de Guayacán Orquesta. | Foto: El País

Cocorobé le dio a la agrupación el impulso internacional...

Tuvo un impacto fuerte en Bogotá y llegó a primeros lugares en Francia. Abrió un camino bien importante en la historia de Guayacán. Esto hace que Alexis diga: “Tiene que seguirme escribiendo canciones”.

¿Cómo surgieron Un Vestido Bonito y Mi Muchachita?

Mi inclinación era hacia lo romántico, venía de hacer baladas, pero Alexis decía que las canciones eran muy aguadas, quería música de golpe, se enamoró de La Más Bella, Cocorobé, Vestido Bonito y Mi Muchachita. Y Dios nos bendijo porque fueron unos éxitos muy grandes no solamente a nivel nacional, sino internacional, hasta que llega Oiga, Mire, Vea, con la que Guayacán da un salto cuántico, de ser una orquesta nacional pasamos a ser de índole mundial.

¿Cómo surge Oiga, Mire, Vea?

Es la canción de salsa más reconocida en el mundo, la gente no sabe quién la hizo, ni quién la interpreta, pero la usan en escuelas de salsa en el mundo. Cuando Alexis va una vez a Bogotá, donde yo trabajaba como ingeniero, me dice que la gente de Cali quiere que Guayacán le haga una canción, la hago y se la muestro, y me dice: “Te dije que le hiciéramos una canción a Cali, no que la hicieras” (risas). “Pero ahí falta que hables de Pance, dice, y le digo: ‘¿Y qué es Pance?’. Me explicó que era un río, me habló del Parque de la Salud, el balneario al que iba la gente los domingos, escribí dos versos y se la mostré, para que la corrigiera, y me dijo: “Está bien” y se grabó. Fue un éxito desde el primer momento.

¿Cómo reaccionaron cuando Arcángel dijo que Oiga, Mire, Vea era de Niche?

Nos da risa, alegría, gozo, sabemos que la canción está ganando territorio siempre. Todos los artistas internacionales que vienen a Cali, sea de pop o urbano, la cantan; Alejandro Fernández hasta Silvestre Dangond, la cantó. La gente le pone color, a nosotros nos da mucha risa.

“Oiga, Mire, Vea tiene muchas anécdotas, nos ha dado grandes satisfacciones. Es la canción de Guayacán que más jalona y sigue campante, como si acabara de salir del horno”. Nino Caicedo, compositor y músico de Guayacán.

Acordes

“Invierno en Primavera es una canción maravillosa. Estuvo durante dos años en los 20 primeros lugares de la radio en su época en México, y seis meses en el primer lugar. Nos llevó a ese país y a ser muy queridos por los mexicanos. Nosotros, con Alexis, pensábamos que esta canción iba a gustar en la zona andina colombiana, en el Eje Cafetero, porque es de despecho, pero nunca pensamos que iba a ser tan fuerte a nivel mundial. Junto a Te Extraño y Cada Día que Pasa, siguen en los listados musicales hoy”.

“Los que creen que la salsa está pasando un mal momento o desaparece, que entren a las plataformas y vean el rango de edad de los que nos escuchan. Cali nos ve a final de año, de resto estamos viajando por el mundo, gracias a que la salsa está vigente y viva. Que existan otros géneros de moda, es normal”.