Las mascotas requieren una alimentación equilibrada que los mantenga sanos y fuertes, por ello, es indispensable que según el tipo de perro o gato, se consulte con el veterinario sobre la mejor manera de tener una mascota saludable. En el caso de los perro estos deben comer principalmente proteínas como las carnes y alimentos recomendados por profesionales.
Tenga en cuenta que, es crucial elegir alimentos de alta calidad diseñados específicamente para perros, ya que estos contienen los nutrientes adecuados y en las cantidades correctas. Además, es importante ajustar la cantidad de alimento según la edad, tamaño, nivel de actividad y estado de salud del perro.
Si bien se cree que los cachorros deben tomar leche de vaca, esta puede ser riesgosa para su salud por la gran cantidad de grasas, azúcares y calorías que le puede producir obesidad, pancreatitis y otras enfermedades. Si bien la leche tiene calcio y minerales, estos nutrientes se pueden obtener en la dieta con otros alimentos que sí son saludables para ellos.
El portal Pet MD indica que “los perros nacen con las enzimas necesarias para digerir la leche materna, que es más rica en nutrientes y contiene menos lactosa que la leche de vaca. Con el tiempo, los perros pueden perder las enzimas que necesitan para digerir la leche que los alimentó cuando eran cachorros, es decir, se vuelven más sensibles a la lactosa presente en la leche, especialmente cuando se ofrece en grandes cantidades”.
¿Cómo saber que la mascota tiene intolerancia a la lactosa?
- Vómito
- Diarrea
- Gases recurrentes
- Hinchazón y dolor abdominal
- Disminución de apetito
Si el cachorro necesita un sustituto a la leche por alguna razón, el veterinario le dará la recomendación de los productos con los que debe alimentar a su mascota para evitar que se enferme.
Además, de acuerdo con los profesionales, la mejor manera de hidratar a su perro o gato es con agua.
El chocolate, un peligro para su mascota
El chocolate contiene un compuesto llamado teobromina, el cual resulta tóxico para los perros. A diferencia de los seres humanos, los perros procesan esta sustancia mucho más lentamente, lo que lleva a una acumulación tóxica en su organismo. Según la Sociedad Americana para la Prevención de la Crueldad hacia los Animales (ASPCA), cuanto más oscuro y amargo sea el chocolate, mayor será su contenido de teobromina y más peligroso será para los perros.
- Problemas digestivos: El chocolate puede causar malestar estomacal, vómitos y diarrea en los perros, lo que puede llevar a la deshidratación y la pérdida de electrolitos.
- Problemas cardíacos: La teobromina puede afectar el ritmo cardíaco de los perros, provocando taquicardia, arritmias e incluso insuficiencia cardíaca.
- Daño hepático: La toxicidad del chocolate puede afectar negativamente el hígado de los perros, causando daño hepático e incluso fallo hepático.