Los Makerspaces son espacios de aprendizaje colaborativo creados para explorar, diseñar, construir y dar forma a ideas propias, con el fin de elaborar proyectos que den solución a las problemáticas actuales de la sociedad.
Por ello, se han convertido en el escenario ideal para los estudiantes del Colegio Jefferson, de forma que aprendan haciendo, principal propósito de esta nueva tendencia educativa que empodera y motiva al estudiante para que alcance su máximo potencial.
Juan Pablo Caicedo Serrano, rector del Colegio Jefferson desde el año 2012, egresado de la misma institución y magíster en Proyectos Educativos mediados por TIC de la Universidad de La Sabana, asegura que la materialización de este proyecto se dio luego de una ardua investigación, no solo de las nuevas metodologías educativas, sino también “del análisis de las necesidades que tenían nuestros estudiantes de aprender de manera significativa e integral y de poder hacer las cosas por sí mismos y no que se les entregue todo hecho”.
Los Makerspaces de la Institución se encuentran en el edificio Senior, una construcción de dos plantas con seis salones remodelados y dotados con tecnología avanzada para que los estudiantes de grados 11 y 12 cursen todas las materias de su año lectivo en aulas Maker. Estos espacios se suman a los dos Makerspaces ya existentes, los cuales continúan en funcionamiento para el uso de alumnos de primaria, middle y junior.
“La idea era darles mayor protagonismo a nuestros estudiantes, que encontraran ese placer, esa comodidad, ese asombro por aprender”, resalta Willmer Luna, director TIC, quien también manifiesta que el enfoque de los Makerspaces se basa en que los estudiantes aprendan haciendo y que cuenten con espacios para que empiecen a vivir el ambiente de estudio que seguramente encontrarán en su educación universitaria.
“Me llamó mucho la atención que son muy similares a las aulas que hemos observado en algunas universidades. Considero que es una muy buena iniciativa, especialmente para nosotros que ya nos vamos a graduar, porque es como una adaptación para el paso del colegio a la universidad”, sostiene Joaquín Cardona Meléndez, estudiante de grado 12, último nivel del bachillerato del Jefferson.
La similitud con los salones de clase universitarios se debe a la planeación que se hace de los espacios, pues cada aula Maker está adaptada a las necesidades de las áreas que componen el plan de estudio. El Makerspace de Humanidades, por ejemplo, tiene sillones que permiten que el estudiante esté más cómodo durante charlas o debates, mientras que el área de matemáticas se caracteriza por contar con tableros borrables que ocupan toda la pared para que de esta forma, tanto el estudiante como el maestro, puedan realizar ecuaciones de grandes extensiones.
Todos los Makerspaces del Colegio Jefferson cuentan con recursos tecnológicos y didácticos, así como insumos para distintas prácticas científicas y proyectos STEM, entre los que se encuentran: pantallas de proyección 4K, superficies de escritura de piso a techo, pantallas de proyección inalámbricas, mesas movibles y aire acondicionado, entre otros equipos.
Vale la pena resaltar que estos Maker no son el resultado final. “Desde el área directiva estamos enfocados en todo lo que podamos agregar para ayudarles a los maestros a propiciar dinámicas de clase acordes al mundo de hoy. Estos espacios siempre están mutando”, sostiene Luna.
De hecho, Martina Salas, estudiante de nivel 11 afirma que “la forma en la que aprendemos ahora es más fácil, tenemos muchos más recursos”, siendo objetivo de la Institución transformar la práctica educativa en beneficio del aprendizaje de los estudiantes.