Las recientes incautaciones de sustancias estupefacientes en las vías del Valle del Cauca han encendido las alarmas de las autoridades, ya que los delincuentes utilizan cada vez más su ingenio y creatividad para intentar camuflar las drogas y que no sean descubiertos. Por esta razón, el comandante (e) del Departamento de Policía Valle, coronel Santiago Garavito, sostuvo que se intensificaron los operativos de control y están especialmente atentos a todas las modalidades identificadas.

Para estos hechos ilícitos se utilizan todo tipo de vehículos, principalmente carros, camionetas o camiones, muchos de ellos intervenidos por los criminales. “El camuflaje de sustancias estupefacientes a través de dobles fondos es una de las conductas recurrentes”, aseguró el uniformado, ya que de esta manera pueden trasladar grandes cantidades de droga.

Recientemente se incautó más de una tonelada de cocaína, transportada en un camión en el que se movilizaban ocho personas, quienes se hacían pasar por militares. | Foto: El País

Esta modalidad consiste en modificar la estructura del medio de transporte para crear un compartimento adicional, ya sea con un doble techo o puertas. Según un experto en seguridad consultado por El País, si bien es posible que la pericia de los Policías en medio de los operativos resulte en el descubrimiento de estos espacios, generalmente una fuente humana es la que informa sobre la existencia de los mismos.

“Con el hallazgo de dobles fondos casi siempre las autoridades reciben llamadas alertando sobre el delito, y por ello en el puesto de control se verifican las características del vehículo y descubren que ha sido alterado. Sin embargo, hay casos en los que los uniformados son especializados y logran detectar algo raro que resulta ser un compartimento secreto creado para ocultar estas sustancias”, aseguró el especialista.

Otra de las maneras utilizadas para el transporte de drogas es el camuflaje con mercancía, ya sean alimentos, productos para el hogar, repuestos, entre otros elementos. “En algunos casos los vehículos tienen contenedores. Por ejemplo, hace unas semanas encontramos uno que supuestamente transportaba una gran cantidad de bultos de cemento que en realidad contenían una sustancia estupefaciente”, afirmó Garavito.

Los dobles fondos son de las modalidades más comunes. | Foto: Departamento de Policía Valle

El uniformado aseguró que a pesar de que la logística de cargar todos estos costales no es fácil, los criminales siguen buscando la manera de desubicar a la Policía, “pero allí está la sagacidad de nuestros hombres para encontrar estos elementos”.

También han resultado capturadas personas que afirman que no conocían la naturaleza de las sustancias que estaban transportando ya que les pidieron llevar una encomienda, una modalidad que aunque ha disminuido en número, sigue afectando a ciudadanos incautos.

“El transporte humano utiliza a personas con algún tipo de necesidad para que sean ellos los que lleven de un sector a otro el paquete, hasta que la droga finalmente llega a otro punto de Colombia”, sostuvo el comandante de la Policía Valle (e).

Vías del Valle, afectadas por el narcotráfico

Según el consultor en seguridad y experto en inteligencia estratégica, Iván Carvajal, las carreteras del Valle del Cauca son paso obligado para los criminales que buscan transportar las sustancias estupefacientes al interior del país, pues el 20 % de la de la producción nacional de cocaína se centra en los departamentos de Cauca y Nariño, donde también se encuentran los cultivos ilegales, sin embargo, los operativos de la Fuerza Pública han sido importantes.

Diversos vehículos son usados con estos fines. | Foto: El País

“Colombia produce, más o menos, dos mil toneladas de coca anualmente y seguramente se incautarán unas 500 toneladas en el transcurso de un año, entonces eso quiere decir que va a haber una afectación de aproximadamente el 25 % en la cadena de distribución”, afirmó Carvajal, lo que perjudica fuertemente a los grupos dedicados al narcotráfico.

Sin embargo, según el consultor en seguridad y experto en inteligencia estratégica, para que este delito disminuya definitivamente se debe afectar también la cadena de producción que continúa marchando sin mayores afectaciones.

“Actualmente no hay erradicación con glifosato ni otras actividades. Hay una estrategia que se llama Misión Cauca, pero no ha arrancado más allá de distribuir algunos elementos de producción agrícola, lo que no ha logrado tener impacto en estas organizaciones”, concluyó Carvajal.