El exjefe paramilitar Salvatore Mancuso acabó de aterrizar en territorio colombiano, aproximadamente a las 2:20 de la tarde de este martes 27 de febrero.
Por razones de seguridad, Mancuso será traslado a la cárcel La Picota, ubicada en el sur de Bogotá, bajo un estricto esquema de protección en el que no se descarta que sea enviado en un helicóptero de la Policía. En esa cárcel sería recluido en el pabellón de extraditables, con el fin de garantizar su seguridad, lo que no implica que vaya a ser aislado.
Quedará a disposición de la Dijín
Verificado el estado de salud de Mancuso, proceso que se cumple con todos los deportados que llegan al país desde diferentes naciones, el exjefe paramilitar quedará a órdenes de la Policía Judicial, Dijín, que lo notificará de los procesos en Colombia en su contra, por los que está condenado en Justicia y Paz a la pena alternativa máxima de ese tribunal, que es de 8 años.
Cabe recordar que al momento de ser enviado a Estados Unidos, Mancuso había sido imputado de los delitos de homicidios, desapariciones forzadas, desplazamientos forzosos, violencia de género y reclutamiento ilícito, entre otros actos cometidos durante su permanencia en las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
Tiene además dos condenas pendientes en Justicia y Paz, en tanto que la Fiscalía lo acusó en 2014 de 4093 delitos cometidos en diferentes departamentos, entre los que se encuentran Córdoba, Antioquia, Meta, Santander y Norte de Santander.
Mancuso se benefició de la determinación de Justicia y Paz que le otorgó una pena alternativa de ochos años de prisión por su desmovilización, a pesar de haber sido condenado a prisión en Colombia por más de 30 delitos.
Según la Fiscalía, Mancuso ha estado involucrado en numerosos actos atroces, como las masacres de El Aro, El Salado y Mapiripán, así como en magnicidios y desplazamientos forzados en varios departamentos del país.
Con información de Colprensa