La Fiscalía General de la Nación y la Policía Nacional capturaron a seis integrantes de una banda que se dedicaba a la explotación sexual de menores, incluidos indígenas, en municipios de la zona de frontera con Ecuador, informaron este jueves las autoridades.
Las instituciones señalaron en un comunicado conjunto que los victimarios fueron capturados en varias operaciones desarrolladas en las localidades de Mocoa, Villa Garzón y Puerto Asís, Putumayo.
Entre los capturados se encuentra Jhonatan Julián Jacanamejoy, alias 'Tato', quien creaba perfiles falsos en redes sociales para buscar menores entre los 13 y 17 años a las que hacía ofertas para trabajar en una supuesta agencia de modelos.
"Las niñas y adolescentes que aceptaron los ofrecimientos en realidad eran inducidas a ejercer actividades de tipo sexual por las que el señalado cabecilla de la estructura cobraba entre 60.000 y 200.000 pesos", agregó la información.
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Según las investigaciones, las víctimas eran transportadas hasta hoteles ubicados en municipios cerca a la frontera y algunos en Ecuador, donde las personas que pagaban por su explotación las esperaban.
Colombia y Ecuador comparten una frontera de 586 kilómetros en donde viven unos tres millones de personas.
Tras la investigación, las autoridades recuperaron a 13 menores, de los cuales seis pertenecían a una comunidad indígena y a quienes el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Icbf, les restableció sus derechos.
"En las indagaciones se conoció que 'Tato' perteneció a un resguardo indígena del que fue expulsado por su comportamiento ilegal y porque gran parte de las adolescentes engañadas pertenecían a su comunidad", señalaron.
Por todo lo anterior, a los detenidos se les imputará cargos por los delitos de trata de personas agravada en concurso heterogéneo, estímulo a la prostitución de menores, concierto para delinquir y facilitación de medios tecnológicos para ofrecer servicios sexuales.
Alias "Tato" fue enviado a la cárcel de Pitalito, en el departamento del Huila, mientras que otros dos "permanecerán recluidos en resguardos indígenas" y los tres restantes, que administraban hoteles en la zona, no podrán salir de su vivienda.