Durante el pasado mes de julio se registraron 81 homicidios en Cali, cifra que es 12% mayor si se compara con el mismo mes del año pasado, cuando en la ciudad se presentaron 72 casos. Respecto a las cifras totales del año, los datos entregados por el Observatorio de Seguridad muestran que entre el 1 de enero y el 31 de julio han sido asesinadas 593 personas en la ciudad.
Los días más violentos durante el mes que acaba de terminar fueron los sábados 1 y 15 de julio, el lunes 17 y jueves 20, pues en cada uno se presentaron cinco asesinatos en la ciudad. Lo contrario ocurrió en las jornadas de los sábados 22 y 29 de julio y durante el viernes 28, cuando no ocurrieron casos de homicidio.
El domingo sigue siendo el día con más homicidios en Cali, ya que según las estadísticas entregadas, de los 593 asesinatos que se han cometido este año en la ciudad, 140 han ocurrido durante este día, es decir el 24% del total de los casos.
Curiosamente, el día en que menos casos de homicidios se han presentado durante el 2023 es el viernes, con 68 reportes, seguido del miércoles, con 69 registros.
“El hecho de que aumenten los homicidios no es bueno. El mejor escenario para Cali sería una reducción contínua año tras año debido a que eso demostraría que la ciudad estaría avanzando, pero si un año se reducen y al siguiente aumentan, es una muestra de que no hay un progreso constante”, explicó Pabló Uribe, experto en materia de seguridad.
Para Héctor Herrera, exuniformado de la Policía, una de las razones por las que los asesinatos en Cali han aumentado es porque se ha reducido el pie de fuerza en la ciudad. “Antes había cuadrantes que contaban con 8 o 12 patrullas, pero ahora se han reducido a 2 o 3 y eso es grave”.
La Comuna 15, ubicada en el oriente y de la que hacen parte barrios como Mojica, El Retiro, El Vallado y Comuneros, es en la que más asesinatos se han presentado. Allí han acabado con la vida de 79 personas, 24 casos más si se compara con el mismo periodo de tiempo de 2022 y 10 registros más si se analiza con el año 2021.
En la Comuna 13, también en el oriente de la ciudad, se han registrado 64 asesinatos y en la 14, van 38 casos.
“Los homicidios en Cali tradicionalmente se han ubicado en la ladera y en el oriente porque estas son zonas con problemas sociales como pobreza, bajos niveles de educación, pocas oportunidades, desigualdad y hay estructuras familiares que están rotas. Además, allá no hay buena presencia estatal y, a pesar de que se ha hecho una inversión grande en cuanto a la infraestructura para la educación, la formación que reciben al interior de estos planteles no es la mejor”, explicó Pablo Uribe.
El experto sostuvo que es muy importante analizar el efecto acumulado del trauma en estas zonas. “El impacto por la violencia que la población de estos lugares ha tenido que soportar durante muchos años es muy grande. Esto se acumula y podría haber un problema muy fuerte de salud mental en estos barrios que desencadena en comportamientos violentos y negativos. Es hora de que se aborde esta problemática”, dijo Pablo Uribe.
Los barrios más violentos son Los Comuneros I, con 22 casos; Mojica, con 21 reportes; Alto Jordán, donde se han registrado 15 asesinatos; Potrero Grande, con 13 homicidios y El Morichal, con 12. Todos ubicados en el oriente de la ciudad.
“En estos lugares, por lo general, se presentan delitos como el porte ilegal de armas, el microtráfico y, muchas veces en medio de la ingesta de licor, entre ellos mismos se mandan a asesinar por problemas e intolerancia”, explicó Héctor Herrera.
“Desde la Secretaría de Seguridad es muy poco lo que se ha hecho en Cali. El delito sigue aumentando en las mismas comunas donde siempre ha estado presente y se deben crear nuevas estrategias para ver qué se puede hacer. Muchos hemos recorrido las calles de la ciudad en las madrugadas y no encontramos un solo uniformado”, finalizó el exuniformado, y añadió que es urgente que se hagan puestos de control relámpagos que no duren más de 20 minutos en un mismo lugar y poder así sorprender a los criminales.