En la comuna 15, oriente de Cali, uno de los sectores de la ciudad más azotados por la violencia, las autoridades adelantaron operativos de allanamiento que permitieron la captura de 10 personas involucradas en la presunta extorsión a estudiantes de colegios de esta zona del Distrito de Aguablanca, a los cuales les cobraran para poder pasar entre cuadras.
La intervención se dio luego de la denuncia que hicieron docentes y líderes, los cuales afirmaron para El País que entre 1000 y 1500 pesos les cobraban los delincuentes a los menores para permitirles pasar entre las calles de los barrios de la Comuna 15.
Asimismo, la Policía se tomó cinco instituciones educativas de esta zona de Cali en el marco de un plan piloto donde los uniformados adelantarán requisas, vigilancia y pedagogía puerta a puerta en las viviendas de la zona para alentar a la ciudadanía a denunciar. Se espera que en los próximos días este plan se extienda a más instituciones de la ciudad.
Desde inicios del presente año se han presentado varias denuncias consistentes en los problemas que se registran en barrios donde las llamadas fronteras invisibles son una preocupación de la ciudadanía. Eso, además de la venta de alucinógenos, para lo cual estarían, también, instrumentalizando estudiantes, que se camuflan con facilidad en entornos escolares, o en los alrededores de las instituciones educativas.
El cobro de peajes se ha convertido en una práctica en sectores donde operan bandas y amedrantan a la comunidad, especialmente a los menores, que resultan afectados por esta situación. De hecho, muchos han alertado sobre la salida de clases, cuando se encuentran en la jornada de la tarde, por temor a ser blanco de la delincuencia.
Nueva agresión en colegio de Cali: juego finalizó con un joven herido; ¿Qué dicen los directivos del plantel?
Una nueva agresión se presentó en el interior de la Institución Educativa Antonio José Camacho. De acuerdo a las declaraciones, dos estudiantes de noveno grado se habrían agredido en medio de un juego llamado “toca piso”.
Fue en ese momento cuando uno de los alumnos atacó a su compañero, presuntamente con un arma blanca.
“Un joven agrede físicamente y el otro le responde con un arma de filo haciéndole una rayón al otro, vamos a tomar las decisiones con base en la norma”. Así lo explicó José Mauricio Arroyo, rector de la institución.
Como parte de la ruta de atención, se convocará una reunión en los próximos días con los estudiantes del grado noveno para superar estos problemas de convivencia.
“Esta situación aunque no fue crítica, sí deja una alerta, por lo que tenemos que actuar con el comité de convivencia de la institución educativa para citar a los padres de familia y tomar las medidas correspondientes”, expresó el funcionario.
Añadió que en el proceso se vinculara la Policía de Infancia y Adolescencia, la Secretaría de Salud y un apoyo psicológico, para generar un acompañamiento integral a los jóvenes y a sus familiares, además de los estudiantes del plantel educativo.
“También le hemos pedido a la Policía Metropolitana y a la Secretaría de Seguridad y Justicia para que realicen patrullajes en los entornos de los colegios en los que a veces hay personas allí incitando a jóvenes a peleas o induciéndolos en el consumo de drogas”, puntualizó el Secretario.
El rector explicó que este tipo de juegos bruscos entre los estudiantes continuamente finalizan en lesiones o contusiones menores que no son notificadas a los docentes.
El Secretario de Educación, José Darwin Lenis, envió un mensaje de alerta ante lo que viene sucediendo en las instituciones educativas.
Preocupan los casos de agresión en el colegio
La menor estaba sufriendo de matoneo por parte de otras tres alumnas, incluyendo la agresora, aunque no se había atrevido a denunciar.
“Mi hija se le acercó a una de las chicas que la molestaban y le preguntó, ¿por qué se meten tanto conmigo?, ¿qué les he hecho?, en ese momento la agresora se le acercó y mi hija aprovechó para preguntarle también. Esta chica le responde que seguirán molestándola y se quitó el maletín. Luego su ‘compinche’ le pasó una navaja pequeña y la atacó”, relató Yenny Rojas, madre de la menor herida tras un altercado en el colegio Antonio José Camacho, en el centro de Cali.
Según versiones de maestros, directivos y compañeros de la víctima, nunca tuvieron conocimiento de que la menor estuviese siendo acosada por su compañera de clase.
“Ellas no se caían bien y era algo de hace tiempo, pero normal, estaban conversando dentro del salón y de un momento a otro la pelea pasó a mayores. Eran más o menos las 3:00 p.m. y todo fue muy rápido”, contó una de las estudiantes compañera de la víctima.
Aunque las directivas se reunieron y trataron el tema con los padres de familia y el Comité de Convivencia de la institución, parece que los esfuerzos no fueron suficientes.
Según Adriana Corrales, teniente de la Policía de Infancia y Adolescencia, los casos de agresión son muy preocupantes, pues aseguró que este colegio había sido visitado semanas atrás.
“Esta institución está priorizada desde el año pasado, tiene un padrino que es el capitán de la estación de Junín”, dijo, explicando que constantemente están visitando la institución por los casos reiterativos de agresión.
Asimismo, Corrales afirmó que en lo que va del año en Cali se han presentado alrededor de 15 casos de violencia entre estudiantes de distintas instituciones educativas.