La operación ‘Blackjack’, trabajada en conjunto por la Fiscalía General de la Nación, agentes de la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos (DEA) y las autoridades panameñas, permitió la captura de cuatro ciudadanos colombianos señalados de pertenecer a una estructura dedicada al narcotráfico.
Los individuos fueron apresados en la capital del departamento del Valle y en Acandí, municipio de Chocó, y ahora se preparan para ser extraditados a los Estados Unidos, pues son requeridos por la corte Distrital de los Estados Unidos para el Distrito Este de Texas.
“Esta estructura liderada por un sujeto conocido como Dany Tash se encargaba del envío de la sustancia estupefaciente, la cual salía de diferentes municipios nariñenses con destino hacia Panamá, Costa Rica, Honduras y Estados Unidos”, indicó el Coronel Edwin Masleider Urrego, director de Investigación Criminal e INTERPOL.
Los ciudadanos colombianos fueron trasladados a Bogotá, donde se surtirán los trámites correspondientes para que se lleve a cabo su extradición a los Estados Unidos. En ese país serán procesados por los delitos de concierto para delinquir y tráfico de drogas ilícitas.
“Se habían aliado con otras estructuras criminales, como la columna móvil Jaime Martínez del Estado Mayor Central de las Farc y ‘Los Shottas’, quienes delinquen en el Pacífico Colombiano”, añadió el Coronel Urrego.
De acuerdo con las investigaciones adelantadas, esta estructura criminal comercializaba grandes cantidades de cocaína desde puntos de acopio ubicados en López de Micay, El Naya y Puerto Merizalde, donde había laboratorios clandestinos que eran custodiados por esa columna de las disidencias de las FARC.
Los narcotraficantes les pagaban a los subversivos por los impuestos de producción y la seguridad. Mientras tanto, ‘Los Shottas’ se encargaban de custodiar el alcaloide en las zonas urbanas durante su transporte en vehículos de carga pesada, los cuales eran modificados para poseer caletas sofisticadas que resultaban complejas a la identificación de las autoridades.
La cocaína llegaba al puerto de Buenaventura en el Valle y a Bahía Solano en Chocó, donde era puesta en lanchas rápidas Tipo GO FAST y Semisumergibles cuyos pilotos recibían indicaciones en tiempo real sobre los trayectos que debían realizar, gracias a un sistema de rastreo con dispositivos satelitales.
“Tenían una capacidad de envío de 15 toneladas de clorhidrato de cocaína. En once meses de actividades investigativas se logró la incautación, en once casos, de 4,5 toneladas de este estupefaciente”, detalló el Director de Investigación Criminal e INTERPOL, quien agregó que la estructura registró ganancias anuales cercanas a los $ 950 millones de dólares producto de la actividad ilegal.
Sin embargo, con la captura se logró desmantelar por completo a este emporio criminal dedicado narcotráfico, debido a que en el mes de enero de este año fueron capturadas en Panamá otras 39 personas de esta organización dedicadas al tráfico de estupefacientes.