Hay temor entre las comunidades de las veredas El Turco y Tres Quebradas, en la zona rural del municipio de Santander de Quilichao, por los combates que se registran entre disidentes de las Farc y miembros del Ejército Nacional.
De acuerdo con la secretaria de Gobierno de esta población, María Luisa Holguín, estos enfrentamientos comenzaron en las horas de la tarde de este viernes 27 de septiembre, al parecer en medio de los patrullajes que adelantaban los soldados en esta parte del norte del departamento.
“Es una situación que lamentablemente debemos reportar y, como Administración Municipal, estamos prestos para ayudar a los pobladores de estas veredas, las cuales se integran al corregimiento de Mondomo”, expresó la funcionaria.
Mientras tanto y, según la versión de periodistas quilichagüeños, son integrantes del beligerante frente Dagoberto Ramos de las Farc quienes hostigan a los soldados que adelantan operaciones en esa región.
“La zona es controlada por los alzados en armas, más cuando hay casos de minería ilegal en esta parte de la zona rural de Santander de Quilichao y, como la Fuerza Pública llegó a estas veredas, se presentan estos ametrallamientos, los cuales causan temor entre la comunidad, porque son cerca de fincas y viviendas”, relatan los comunicadores de esta población nortecaucana.
Los integrantes del Ejército indicaron que, por el momento, se mantienen las operaciones ofensivas contra esta organización armada ilegal, liderada por alias Iván Mordisco.
“Por aire y tierra se mantiene la ofensiva de las tropas del Comando Operativo Apolo que sostienen combates contra la estructura residual Dagoberto Ramos en zona rural de este municipio”, informan desde la Tercera División del Ejército.
Aunque en los vídeos que circulan de estos choques armados se evidencia la intensidad de los ametrallamientos, hasta el momento no se reportan heridos o víctimas mortales.
Esta situación sucede luego que el Ejército, con el apoyo de la Policía, retirara un cilindro y una bandera del Ejército de Liberación Nacional, ELN, que fueron abandonados cerca de una escuela del barrio Bello Horizonte, en pleno casco urbano de Santander de Quilichao.
Como bien explicaron integrantes de la Fuerza Pública, esta clase de actos corresponden a las acciones propagandísticas que adelantan estas organizaciones armas al margen de la ley para confirmar su presencia en estas áreas del departamento.