En las últimas horas, el Comisionado de Paz, Otty Patiño, manifestó que antes que termine el año 2024 saldrá el decreto con el que se ordena al Ejército Nacional cesar operaciones militares en contra del grupo armado ilegal Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano, antes Segunda Marquetalia.
A esa estructura criminal pertenecen hombres que eran parte de las disidencias de las FARC, comandada por alias ‘Iván Márquez’, con las que el gobierno está realizando acercamientos para diálogos de paz en el sur del pacífico colombiano.
El Comisionado de Paz afirmó, “es muy distinto el término cese al fuego bilateral a un fuego al cese simultáneo, razón por la cual se entablarán diálogos con estos grupos que están adquiriendo compromisos de transitar a la vida civil y contribuir a la transformación de los territorios“”.
Dentro de marco del proceso de diálogos con la estructura, se realizaron reuniones este 13 y 14 de diciembre de 2024, en los que se logró un avance para la paz y se implementará un proyecto piloto de sustitución de cultivos en los departamentos de Nariño y Putumayo.
“3.000 hectáreas de cultivos de uso ilícito ubicadas en territorios con presencia de la Coordinadora Nacional Ejército Bolivariano, en Nariño (2.000 ha) y Putumayo (1.000 ha), así como una subcomisión sobre transición económica en el marco de la mesa de negociación”.
El acuerdo será coordinado por Gloria Miranda, Directora de la Dirección de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito de la Agencia de Renovación del Territorio, entidad que vigilará el proceso de tránsito hacia economías lícitas que está establecido en la Política Nacional de Drogas, que coinciden con las políticas ambientales y de paz.
Los procesos de planeación para la sustitución de cultivos empezarán desde enero de 2025 con una reunión entre las partes, y lo que se acuerde se implementará en marzo de 2025.
Este acuerdo entre el gobierno y la estructura del grupo armado ilegal tendría como prioridad la transformación del territorio de Nariño y Putumayo, que influya en la promoción de desarrollo rural integral y sostenible en las zonas rurales, las regiones.
Para que se puedan llevar a cabo los acuerdos y cumplir con los compromisos, es necesario que haya una intención de paz por parte de los grupos armados que colaborarán con el gobierno para traer paz en estas regiones, que históricamente han sido marcadas por el conflicto armado y las economías ilícitas.