La guerrilla del Ejército de Liberación Nacional, ELN, emitió un comunicado a altas horas de este domingo, 19 de enero, en el que entregaron sus razones para adelantar una guerra abierta contra los disidentes del frente 33 de las Farc en la región del Catatumbo, en Norte de Santander.
“Los firmantes de paz ultimados no eran civiles, jugaban a dos bandos”, sentencian los integrantes de esta organización armada ilegal al exponer que sus acciones militares van dirigidas contra los miembros de las disidencias de las Farc porque “reciben los subsidios del Gobierno tras acogerse al Acuerdo de Paz, pero a la vez son integrantes del frente 33 que delinque en el Catatumbo”, reza el comunicado.
Paso seguido, el ELN expone que consideran como un fracaso el proceso de paz con las extintas Farc, de ahí que muchos excombatientes terminaron en los grupos armados o delincuenciales de la región, como en el caso del frente 33, el cual terminó recibiendo a los desmovilizados que desertaron de los procesos de reincorporación.
“El frente 33 de las ex-Farc es producto de ese fracaso de paz, y muestra de ello es que parte de su comandancia y combatientes son desmovilizados de las antiguas Farc-EP que fungen como ‘firmantes de paz’, al tiempo que operan como combatientes o milicianos del 33″, agrega el comunicado, el cual fue emitido en las últimas horas por las redes sociales.
Este mensaje se convierte entonces en una de las tantas explicaciones que ha dado el grupo guerrillero sobre la cruenta guerra que ahora adelanta contra los disidentes de las Farc en municipios como Tibú, obligando al desplazamiento de más de cinco mil campesinos, quienes al ver la intensidad de la violencia en esta región no dudaron en salir del Catatumbo para refugiarse en Cúcuta, otras ciudades de Colombia o en Venezuela.
“Jugaban a dos bandos, por un lado, ponían la cara ante la JEP para recibir prebendas, y por otro, integraban las filas del 33, prueba de ello son las armas, la logística y la cocaína decomisada en las operaciones contra estos sujetos. Bien conocen los pobladores de la región de las acciones de estos milicianos, pero desconocidas para los funcionarios y los gobernantes que opinan desde las oficinas en Bogotá e ignoran las realidades de la región”, reza parte del comunicado.
Después, el ELN justificó el asesinato de los cinco firmantes de paz de la región porque para los integrantes del frente de guerra Nororiental “eran jefes de milicias y responsables de las finanzas del 33″.
Por último, informan que también atacan a los disidentes comandados por alias Richard Suárez porque este es un “delincuente” que llegó al Catatumbo desde el Caguán, para sembrar el terror en esta región del nororiente colombiano.
Y cuestionaron al presidente Gustavo Petro por estar cerca de “anunciar un estado de conmoción interior, pero sin cumplir con el Pacto Territorial por el Catatumbo, es decir, una salida militar a los problemas sociales de la región”, finaliza la comunicación escrita.