Por: Anderson Zapata Reyes / Editor de Orden
La semana que acaba de terminar sin duda ha sido la más compleja que ha tenido estando al mando de la Policía Valle el coronel Giovanni Cristancho, quien asumió las riendas de la institución en el departamento el pasado 2 de enero.
Luego de la compleja situación de orden público que se vivió en Tuluá el fin de semana pasado tras la captura de alias Nacho, cabecilla de la banda La Inmaculada, que opera en esa ciudad, el coronel habló con El País y explicó cómo, a pesar de que gran parte de los integrantes del grupo están en prisión, desde allá continúan delinquiendo. Además, explicó qué hay detrás de la masacre en Ansermanuevo y reveló su preocupación por el aumento de los homicidios en el Valle en 2024. También se refirió al Clan del Golfo.
El jueves pasado estuvo reunido con varios mandatarios de municipios del norte del Valle y la Procuraduría. ¿Cuál fue la conclusión de ese encuentro?
En esa reunión la Procuraduría expuso su punto de vista luego de la recolección de datos que ellos realizaron después de diferentes diálogos con la comunidad, con líderes, gremios y víctimas.
Ellos nos manifestaron que en la parte alta los productos que están bajando a diferentes lugares de comercialización, especialmente al área de Tuluá, están teniendo que pagar una extorsión y un dinero adicional para su comercialización, por lo que los valores con los que están comercializando son mucho más altos que en cualquier otra parte de Colombia.
Además, en la reunión hablaron sobre la instrumentalización de niños, niñas y adolescentes ya que estos grupos los están utilizando para cometer diferentes delitos. Esto lo está haciendo la banda La Inmaculada. La deserción escolar en Tuluá y en municipios vecinos es muy alta y esto fue algo que nos comentaron los alcaldes. Estos mandatarios tienen mucho temor de que la violencia se expanda hacia sus municipios, eso es lo que ellos más temen.
También nos contaron que la cárcel de Tuluá tiene unos problemas estructurales que se deben solucionar lo más pronto posible.
¿Cómo ha sido el plan de las autoridades para evitar que las acciones de La Inmaculada desencadenen en hechos violentos en otros municipios del centro y norte del Valle?
Se han activado más redes de información de cooperantes y de apoyo para poder evidenciar los momentos en que ellos quieren hacer tránsito. También conocimos que las extorsiones carcelarias crecieron y al verificarlas nos dimos cuenta que no todas son del grupo La Inmaculada. Hoy muchas de esas llamadas se han hecho desde la cárcel de Cómbita, en Boyacá, o desde Cartagena.
Hoy también le puedo decir que Buga en este momento tiene desafortunadamente en alza el homicidio, pero obedece a diferentes fenómenos y La Inmaculada no tiene nada que ver allí.
Decía el Defensor de Derechos Humanos que es muy probable que grupos como La Inmaculada o Los Flacos, que operan en el Valle, tengan alianzas con disidencias de las Farc. ¿Usted qué sabe al respecto?
Hoy lo único que le puedo decir es que alias Nacho, máximo cabecilla de La Inmaculada, lo capturamos en una zona en la cual delinque la disidencia Adán izquierdo de las Farc.
Para poder estar allá no sabemos si había una unión entre ambos grupos o si sencillamente él llegó hasta este lugar como cualquier campesino.
Incluso, cuando lo capturaron, alias Nacho nos manifestó que él vio subir unas camionetas, pero pensó que era la guerrilla.
Eso quiere decir que si los vio y no se alarmó era muy probable que tuviese una alianza con las disidencias…
A no ser que la guerrilla no conociera quién era él, pero no creo porque él era un bandido.
¿Qué es lo más reciente que se sabe sobre la masacre de tres personas en Ansermanuevo, ocurrida el martes pasado?
En el momento de los hechos capturamos a dos personas y ambas quedaron con medida de aseguramiento intramural por el delito de homicidio agravado. A ambos se les pudo comprobar que fueron los autores materiales del hecho y que pertenecen a la banda Los Flacos.
Estas dos personas fueron a atacar a un integrante de la banda La Nueva Generación, que es conocido como alias Care Niña, quien sobrevivió al ataque y nos identificó a las dos personas que dispararon en su contra.
Una de las muchachas que falleció parece que era la novia o amiga del sicario. Y la otra, al parecer, tenía una relación con uno de los cabecillas de una banda.
Allí, en el norte del Valle, se está presentando una confrontación entre Los Flacos y La Nueva Generación. Es importante explicar que la banda La Nueva Generación es un grupo que sale de la división de Los Flacos, ya que hubo diferencias entre los dos cabecillas.
¿Qué es lo que más le preocupa hoy del Valle del Cauca?
Lo que más me preocupa es el homicidio porque es el delito que más se nos está generando y en el que vamos perdiendo. Vamos a hacer un recorrido por el Valle y voy a comenzar de norte a sur.
En el norte del Valle Los Flacos tienen la capacidad de parar de vender sustancias ilícitas uno o dos días, solo con el objetivo de ver quién está vendiendo y contrabandeando sin autorización de ellos. Ese grupo ha asesinado a sus propios expendedores porque han vendido sin su autorización o porque se han quedado con su dinero. Esto no es normal y no se ve en otras partes. Esto es crítico.
Si vamos a La Unión y a Roldanillo, allá tenemos un grupo que está identificado y se llama La Línea. Su cabecilla principal tiene orden de captura, pues está relacionado con homicidios por temas de expendio de drogas.
Por otra parte, Buga en este momento tiene un fenómeno complejo de homicidio por temas desafortunados como el microtráfico. Allá siempre hubo un grupo que dejó el capo Ramón Quintero y dicen que él anunció que iba a regresar al pueblo, pero los que lo sucedieron dicen que no le van a copiar, por lo que Ramón crearía otra estructura delincuencial y se nos podría generar otro enfrentamiento.
Además, ahora sí tenemos amenazas fuertes frente a la entrada del Clan del Golfo por el Cañón de las Garrapatas ya que no pudieron hacerlo por Buenaventura. El ELN le quiere hacer la contención y el Clan del Golfo viene de haberle ganado el Chocó al a ellos.
Actualmente Palmira y Buenaventura se encuentran estables.
Finalmente, en Florida, Pradera y toda la Cordillera Central tiene una injerencia de la disidencia Dagoberto Ramos que viene desde el departamento del Cauca.
Ese es el panorama de la región y se está trabajando. Los resultados, en temas de operatividad, no han sido negativos y ya presentamos el cartel de los más buscados del Valle del Cauca.
¿Por qué el Clan del Golfo insiste en ingresar al Valle?
El Clan del Golfo siempre va a buscar los puertos, por eso usted no los va a encontrar en Cundinamarca u otros lugares ya que el objetivo de ellos siempre será controlar las salida al mar para controlar la droga, por eso ellos siempre se han peleado la costa.
¿Qué tanto ha ayudado a reducir la violencia la tregua entre las bandas Los Shottas y Espartanos en Buenaventura?
Estamos haciendo intervenciones definidas con personal adicional que viene desarrollando actividades y acercándose a la comunidad. Ayer, por ejemplo, hubo una actividad muy bonita que consistió en ir a casas que se habían incinerado, conseguimos madera y la Policía fue y entre todos comenzamos a reconstruirlas.
Pienso que estamos haciendo cosas importantes con la comunidad y ellos nos están aceptando.
Hay que reconocer que hay una tregua de no agresión entre Shottas y Espartanos, pero nosotros seguimos generando capturas y actividades operacionales con las cuales hemos venido mitigando los delitos. Este año se han capturado tres cabecillas de esas organizaciones, entonces seguimos haciendo nuestro trabajo apoyado con Fiscalía y Armada Nacional.
¿Cómo se están utilizando los uniformados que recientemente han llegado a reforzar las filas de la Policía Valle?
Están destinados a unirse al modelo de la Policía. Eso sí, los que están acá en Tuluá son apoyo y no estarán permanentemente, solo mientras se mitiga el problema que tenemos actualmente. Estarán hasta que tengamos la tranquilidad de que no se planean cometer más hechos violentos como el del fin de semana pasado u otro atentado fuerte.
Los demás uniformados están destinados a estaciones de Policía donde los alcaldes nos han comunicado que su pie de fuerza es muy poco, por lo que se requiere apoyo.
¿Queda usted tranquilo con que alias Pipe y Nacho, cabecillas de La Inmaculada que ya están detenidos, hayan sido enviados a cárceles de máxima seguridad y aislados?
No, para nada y jamás estaré tranquilo hasta que realmente sea efectivo el tema.
Yo conozco bien el fenómeno y el problema que tenemos aquí en Colombia. En La Inmaculada hay hasta siete actores criminales que son los que dinamizan la violencia en la región. Es decir, alias pipe está por encima de ellos y puede llamar a otro hombre que está en un centro penitenciario para que de allí salgan las órdenes. ‘Pipe’ directamente no llama al sicario.
Sé que son cinco personas, igual de fuertes que él, quienes dinamizan la violencia en el centro del Valle.
Si en Colombia no le ponemos seriedad al tema de regular las llamadas y otras cosas, estos delincuentes van a seguir cambiando su modus operandi y no solamente seguirán controlando las bandas por llamadas, sino con otras acciones.
Recuerdo que ‘Otoniel’ mandaba cartas, memorias USB y hacía videos para dar las órdenes.