La Fiscalía General de la Nación informó este martes, 5 de julio, que un juez envió a la cárcel a Roy Joce Guzmán, Roinel Fernando Iscupi y Osma Alexánder Pérez, presuntos responsables del asesinato del patrullero de la Policía Jaime Andrés Ávila, ocurrido el pasado 29 de junio.
Después del asesinato del joven, se dio inicio a una investigación para dar con el paradero de los agresores, por lo que se realizaron análisis de cámaras de seguridad y reconocimientos fotográficos, entre otras actividades investigativas, que dan cuenta de que tres hombres habrían llevado al patrullero a un callejón del barrio Compartir, le quitaron el arma de dotación y le dispararon en varias oportunidades.
Gracias a la labor conjunta de la Fiscalía, el CTI y la Sijín del Departamento de Policía de Cundinamarca se permitió establecer que, luego del crimen, los hombres, de nacionalidad venezolana, se ocultaron en una vivienda, donde finalmente fueron capturados.
En el momento de la captura, las autoridades encontraron en la vivienda armas de diferentes calibres, entre ellas la del patrullero Ávila, la cual le habían quitado en el momento del asesinato.
La Fiscalía imputó a los investigados de acuerdo con su presunta participación en el asesinato del patrullero, por los delitos de homicidio agravado, porte ilegal de armas, hurto calificado agravado y fabricación tráfico y porte de estupefacientes.
En la audiencia de imputación, ninguno de los tres hombres aceptó los cargos y fueron enviados a la cárcel. Por ahora, la Fiscalía continúa realizando las investigaciones pertinentes para capturar a otros presuntos responsables del asesinato del patrullero Jaime Andrés Ávila.
El patrullero desarrollaba investigaciones en contra del microtráfico
La información que la Policía entregó indica que el patrullero Jaime Andrés Ávila se encontraba realizando actividades como agente encubierto en contra de una peligrosa banda denominada Los Cachorros. Esta organización criminal tiene incidencia en el barrio San Antonio, de la comuna Compartir, del municipio de Soacha.
Esa banda ya está siendo investigada desde hace varios meses, por tener nexos con redes de microtráfico y por ser los presuntos responsables de homicidios selectivos en el municipio de Soacha.
La Policía continúa en la búsqueda y captura de otros sospechosos del asesinato del uniformado, entre ellos alias Anthony, quien sería el presunto líder de esta banda delincuencial que tiene azotada a la comunidad de Soacha.
Las autoridades indicaron que gracias a la recolección de información se logró ubicar una vivienda en el barrio San Antonio, Compartir, donde se encontraban los criminales. Además, en el allanamiento se incautaron tres armas de fuego, tratándose de un revólver calibre 38, una pistola traumática modificada con capacidad para disparar proyectiles balísticos calibre 9 milímetros, además del arma oficial de dotación del patrullero, que fue robada al uniformado en el momento del homicidio; también se incautaron 48 dosis de bazuco.
De esta manera, la Policía aseguró que continuará trabajando arduamente para contrarrestar toda acción que vaya en contravía de lo establecido en las normas y del ordenamiento jurídico colombiano.
Cabe recordar que la Policía de Bogotá, en conjunto con la Alcaldía de Soacha, ofreció millonaria recompensa a quien diera información del paradero de los homicidas del patrullero Jaime Andrés Ávila, quien falleció después de recibir varios impactos de bala. El joven fue llevado a un hospital, pero falleció por la gravedad de las heridas.