Luego de que Buenaventura estuviera en el centro de atención en el país debido a la ola de violencia que atravesaba, hoy la ciudad muestra cambios importantes en materia de seguridad.
Y es que de acuerdo con los datos entregados por la oficina del Alto Comisionado para la Paz, las cifras de homicidios pasaron de 35 personas en julio a 3 casos en agosto, mes cuando se firmó una tregua entre las bandas delincuenciales Los Shottas y Los Espartanos, dos estructuras que luchaban por el control del territorio y generaban zozobra, principalmente en las calles de la comuna 12.
Sin embargo, un nuevo acto de violencia entre los dos grupos generó pánico en los habitantes de esta zona del municipio, puesto que hechos presuntamente relacionados con un ajuste de cuentas dejó dos fallecidos, uno de ellos por una bala perdida.
De acuerdo con la información preliminar de las autoridades, presuntos miembros de Los Shottas habrían comenzado a disparar indiscriminadamente con el objetivo de causar la muerte de una persona perteneciente a la organización criminal Los Espartanos.
El comandante de Policía del Distrito Especial de Buenaventura, coronel Oliskyenio Florez, informó que el ciudadano que falleció por causa de un disparo dirigido a otra persona fue identificado como Néstor Raúl Gutiérrez, un conductor de transporte público de 67 años de edad, quien estaba cubriendo la ruta 5 sobre la comuna 12 en compañía de su esposa.
“Cuando sintió que lo impactaron se lo refirió a la señora y perdió el control del vehículo, el cual terminó estrellándose contra uno de los postes de la vía, por lo que fue trasladado a la Clínica Santa Sofía, pero lamentablemente perdió la vida por la gravedad de sus heridas”, indicó.
El uniformado explicó que “en la hipótesis que se tiene del caso de la muerte del señor Néstor Raúl aparentemente se da por una bala perdida, ya que, en ese momento en ese sector se estaba reportando disparos por parte de un grupo irregular, al parecer Los Shottas”.
El líder social Andrés Bolaños, productor audiovisual y fotógrafo documental, afirmó que “ahora se siente un poco más de alivio, el sentido de que los acuerdos están más en firme y se están aterrizando, a diferencia de antes”.
Sin embargo, resaltó que si bien el pacto entre los grupos continúa, el ambiente entre los habitantes es de tensión constante, ya que, aunque se han mostrado cifras positivas en reducción del delito, existen flagelos que continúan afectando a los habitantes de Buenaventura.
“Había más tranquilidad sabiendo que ese acuerdo era muy reciente, pero actualmente observamos que sigue la inseguridad. Aún hay presencia de los robos y extorsiones en el distrito”, indicó, añadiendo que otra preocupación es que la tregua está pronta a terminar, pues se fijó hasta el 4 de noviembre.
De la misma manera, un experto en seguridad y exuniformado de la Policía consultado por El País concordó en que el homicidio registrado pudo ser un hecho aislado y no un dinamizador para que el acuerdo entre las dos bandas acabe. A pesar de ello, las autoridades deben prestar atención a cualquier acción de venganza que pueda generar caos en la región.
“La tregua está mostrando resultados positivos en materia de seguridad y eso tranquiliza a las personas que viven en las zonas que eran más golpeadas por la violencia, pero hay que tener en cuenta que en Buenaventura existen otros actores delincuenciales ocultos que hacen mucho daño con delitos como extorsiones”, señaló la fuente.
Los acuerdos entre Los Shottas y Los Espartanos son una buena noticia para la ciudad, indicó el experto. Sin embargo, añadió que es necesario que la Policía haga seguimiento e inteligencia a otras estructuras que se fortalecen a través de negocios como el microtráfico, la piratería o el transporte de armas.
El líder social afirmó que la intranquilidad de los ciudadanos se manifiesta de muchas maneras. Por ejemplo, en que algunos procuran no acudir a ciertos barrios por temor a la violencia. “Las personas deciden mantenerse en casa desde cierta hora para evitar cualquier tipo de novedad, porque a veces las cosas empiezan así, previo aviso, generando confinamientos y otras violaciones a los derechos”.
Según los especialistas, se debe atacar integralmente la ilegalidad. “La Policía debe entender que estas no son las únicas bandas que cometen actos criminales, deben realizar operativos en zonas focalizadas de violencia y planear las acciones que se tienen que implementar cuando se acabe la tregua”, comentó el exuniformado.
Para romper las barreras de la violencia es necesaria una intervención social, expresó Bolaños. “Se tienen que implementar estrategias como fomentar la cultura, la educación y las oportunidades laborales que son muy escasas y hay más ofertas de los factores delincuenciales. Si se toman esas medidas, los jóvenes no van a agarrar un arma porque tienen un trabajo o un deporte que los tiene entretenidos y una manera de sustentar a su familia”.