La ola de violencia y ataques terroristas que vive constantemente el suroccidente tiene en alerta a la comunidad y a las autoridades. Las disidencias de la Farc ha sembrado miedo y zozobra en gran parte de los municipios de la región.
Ejemplo de esto son los hostigamientos a la fuerza pública y la población civil en las últimas horas en varios municipios del departamento del Cauca y del Valle del Cauca, que dejaron dos uniformados asesinados y múltiples heridos.
El Gobierno realizó un Consejo de Seguridad en Popayán, en el cual el ministro de Defensa dio a conocer que habrá una recompensa de hasta $500 millones para dar con el paradero de seis cabecillas de las disidencias de las Farc, exactamente de la estructura ‘Jaime Martínez’, que estarían detrás de múltiples hechos violentos en Cauca.
Los rostros detrás de los ataques
La Revista Semana tuvo acceso hace unos días a un documento de inteligencia militar con los nombres, rostros y prontuario criminal de los sanguinarios cabecillas de las disidencias de las Farc que están sembrando el terror en Cauca y Valle del Cauca.
Muchos de los expuestos en este documento son responsables de asesinatos de militares, policías y líderes sociales, así como atentados con artefactos explosivos contra la población civil. Algunos vienen delinquiendo desde las antiguas Farc, otros han pasado por diferentes grupos armados y hoy comandan estructuras de hasta 300 criminales armados.
Alias Óscar o Barreto
Uno de los más sanguinarios es Luis Carlos Pinilla Cortes, alias Óscar o Barreto, oriundo de Toribío, Cauca, quien en los últimos días formó otro bloque disidente llamado el Frente 57, que pretende quitarle el control a la estructura Jaime Martínez en Jamundí y otros lugares del Valle del Cauca.
Se cree que alias Barreto es uno de los presuntos autores intelectuales del asesinato del concejal de Jamundí, John Gil, el pasado 27 de abril. Este criminal inició su carrera delictiva en el año 2012, siendo integrante del Sexto Frente de las Farc, donde era guerrillero raso, mando comisión y escuadra. Para el año 2017 fue capturado por el CTI en la vereda Ceneguera (Cajibío, Cauca), cuando exigía pago de extorsión. En ese momento ya era integrante de la Compañía Milton Hernández Ortiz del ELN.
Al salir de la cárcel se unió primero a la estructura Dagoberto Ramos, que opera en el norte del Cauca, y posteriormente a la Jaime Martínez, a mediados de 2020, bajo las órdenes de temible alias Mayimbú. Una de sus primeras tareas fue viajar al norte del Valle del Cauca para expandir los tentáculos de esa columna disidente, donde fundó la compañía Adán Izquierdo, que delinque en Buga y Tuluá.
El 27 de noviembre de 2023, a través de un video publicado en redes sociales, anunció la conformación del Frente 57 Yair Bermúdez, mencionando que hará presencia en los municipios de Tuluá y Sevilla. Posterior a esto realiza un comunicado donde se separa del Estado Mayor Central y asesina, a sangre fría, a varios de sus excompañeros del Adán Izquierdo.
Con esos crímenes se abrió camino hacia el corredor entre los departamentos de Tolima y Quindío. Alias Barreto desempeñó un papel importante dentro del equipo negociador del grupo ilegal, al ser designado para ser el representante del Estado Mayor Central en el mecanismo de verificación con los países garantes del cumplimiento del cese bilateral.
Alias Barreto tiene el rótulo entre las disidencias de ser uno de los cabecillas más sanguinarios. Así quedó comprobado cuando asesinó a su mejor amigo (y también cabecilla del Adán Izquierdo) alias Eiber para quedarse con el dinero producto de las extorsiones.
Estructura Carlos Patiño
Sin duda, una de las estructuras más violentas y grandes que tienen las disidencias de las Farc está en el municipio de Argelia y el corregimiento de El Plateado, lugares donde hace una semana fueron masacrados cinco soldados del Ejército Nacional.
Anderson Andrey Vargas, alias Kevin, es uno de los cabecillas del Frente Carlos Patiño, que está detrás de los constantes ataques a la Fuerza Pública. Este sujeto, según las Fuerzas Militares, ingresó a los 18 años y a los 28 se convirtió en cabecilla.
Es responsable del reclutamiento de menores, instalación de minas antipersonal, homicidios principalmente en Argelia y Balboa, y atentados terroristas en el sur del Cauca.
Pero quizás el cabecilla más mediático de ‘Carlos Patiño’ es alias Dumar, quien tras el asesinato de los soldados se escuchó en un audio señalando a sus hombres cortarles la cabeza a los militares. “Nada de coger prisioneros, todo hijueputa le mochan la cabeza”, dice.
Sobre este criminal, se conoció que ingresó a la guerrilla en 2015 y luego de dos años fue designado para instalar minas y artefactos explosivos en el sur del Cauca; de esa forma, Dumar logró escalar hasta convertirse en cabecilla de escuadra en la estructura Carlos Patiño y ha sido resaltado por ser el autor intelectual de varias de las estrategias de guerra y extorsión que se registran en la región.
Sobre las órdenes de este criminal se conoce que fue quien reanudó la extorsión a agricultores en Argelia, El Tambo y López de Micay, y se estima que el grupo armado recibe hasta $ 600 millones mensuales. Dumar ofrece hasta $ 2 millones de pesos por militar asesinado durante enfrentamientos o en espacios de “plan pistola” y $ 800.000 por uniformado que resulte herido o por la explosión de una mina en la zona; además, entrega hasta $ 700.000 por cada fusil que sea robado.
Sería el principal responsable del reclutamiento de menores, especialmente de los municipios del oriente del Cauca, que luego van a integrar esa estructura en Argelia. Los menores son reclutados para evitar ataques de la Fuerza Pública.
Dagoberto Ramos
El norte del Cauca, por el costado oriental, es dominado desde hace más de una década por la columna disidente Dagoberto Ramos. Este grupo es señalado de atentar contra las autoridades indígenas y señalado de los más recientes asesinatos de gobernadores y personalidades de colectivos sociales, además de los últimos atentados en municipios como Miranda, Corinto y Toribío.
El principal cabecilla es Wilmar Pazu Rivera, alias Cholinga o David, quien cuenta con cerca de 250 hombres en armas, así como redes de apoyo al terrorismo en cabeceras urbanas. Es una de las estructuras más violentas del departamento y es la encargada de la producción y comercialización de coca y marihuana, reclutamiento de menores, asesinatos y secuestros, así como de los hechos registrados recientemente en Corinto y Jambaló.
Su poder se deriva del control de las rutas del narcotráfico y de la comercialización de la marihuana en el triángulo de la marihuana: Toribío, Corinto y Miranda.
Jaime Martínez
La columna disidente Jaime Martínez opera principalmente en el norte del Cauca: Buenos Aires, Suárez y Morales, y en el Valle en los municipios de Jamundí y el Pacífico vallecaucano.
Está al mando de Iván Jacob Idrobo, alias Marlon, quien direcciona las acciones terroristas por el control del narcotráfico que obedece a Jamundí, para salir a la zona Naya. Estructura beligerante que provee de proselitismo y elementos panfletarios a las demás.
El poder de esta disidencia es tanto que si una persona de la zona rural trabaja en el casco urbano y sus labores se extienden hasta las nueve de la noche, que es cuando comienza el toque de queda impuesto por las Farc, la empresa debe enviar una carta a la columna Jaime Martínez especificando que su empleado –o colaborador– excede el horario de la restricción porque, efectivamente, se encontraba trabajando.
En los últimos días, se conocieron varios videos de esta estructura, presuntamente patrullando los cerros de Cali, la tercera ciudad más importante del país. La Jaime Martínez es la responsable de los atentados terroristas del norte del Cauca y Jamundí, así como del asesinato de la candidata a la Alcaldía de Suárez, Karina García, ocurrido en 2019.