La maldad y la sevicia con la que actuó Brayan Snaither Campo Pillimué, el confeso asesino de Sofía Delgado, la niña desaparecida en el corregimiento de Villa Gorgona (Candelaria) y que fue hallada muerta este jueves en un cañaduzal, sorprendió a los investigadores.
No solo por la frialdad con la que reconoció su crimen luego de ser capturado, sino porque Campo Pillimué tenía en su haber un historial de depredador sexual por el que debería llevar varios años preso.
Así lo había solicitado la Fiscalía por otro hecho del 2018, que ante la contundencia de las pruebas el ente investigador solicitó sentencia condenatoria en un proceso penal por el delito de acto sexual abusivo con menor de 14 años, pero el caso sigue inexplicablemente en etapa de juicio.
Seis años después, oculto en la imagen de hombre de hogar y de negocios, este exempleado de una empresa de diseños de ingeniería con sede en Bogotá, logró nuevamente atacar a una menor; al menos la tercera de la que se tenga conocimiento por parte de las autoridades.
En su nuevo rol, Brayan Snaither Campo ofrecía en su negocio en el corregimiento de Villagorgona, en Candelaria (Valle): “Alimento para perros, gatos, pájaros, conejos y peces, con variedad de marcas. También tenemos accesorios, vitaminas, jabones, desparasitantes y muchas cosas más….”.
Fue justamente para comprar un shampoo para bañar a su mascota que Sofía llegó ese 29 de septiembre hasta el negocio ‘Croquetas y Accesorios Chimuelo’, el negocio que Ocampo Pillimué instaló en el barrio La Victoria y que había matriculado apenas el 21 de mayo de este año ante la Cámara de Comercio de Palmira.
Ese fue el último día que la niña de 12 años de edad fue vista con vida y su imagen quedó registrada en una cámara ubicada a pocos metros del lugar de donde fue raptada por Campo Pillimué, al parecer dentro de la misma tienda veterinaria.
Los hallazgos recientes
Sin embargo, ha sido imposible determinar si la menor muerta fue abusada sexualmente, toda vez que no se encontró rastro de piel ni tejidos sino los restos óseos, los cuales se encontraban esparcidos por el lugar donde fue abandonada por su asesino.
Aunque Brayan Campo confesó hacer sepultado el cuerpo, al parecer las lluvias de los últimos días, la humedad del terreno y los productos químicos que se utilizan en la tierra para los cultivos de caña ayudaron a acelerar la descomposición del mismo.
Igualmente, se cree que por acción de algunos animales roedores o depredadores los restos óseos pudieron haber quedado repartidos en un rango amplio de la escena donde fue dejado el cuerpo. Lo que dificulta también determinar las causas de la muerte de Sofía Delgado.
Pero el detalle que más aterra, según le confirmaron a El País fuentes cercanas, es que los investigadores hallaron rastros de calcinación en los huesos encontrados; es decir, el asesino de la menor habría intentado incinerar el cuerpo para eliminar rastros o pistas que pudieran condenarlo.
En Cali, Medicina Legal intenta encontrar en los restos hallados material que permita determinar las causas reales de la muerte de la menor y señales que permitan establecer los abusos a los que Ocampo Pillimué habría sometido a la pequeña.
Hacia el mediodía de este viernes continuará la audiencia de imputación de cargos y solicitud de la medida de aseguramiento contra el asesino de Villagorgona.