La masacre de Nohelia López, Juan Esteban López López y María del Mar Mosquera en el Bulevar del Oriente, sacudió a los vecinos de Marroquín II de Cali, quienes viven con temor e inseguridad luego de que el pasado domingo, a las 7:00 p.m. estos ciudadanos fueran asesinados y dos más resultaran heridos en medio de un ataque sicarial.
A pesar de que se creía que se trataba de un hecho aislado, Valentina Bedoya López, familiar de dos de los fallecidos y uno de los heridos, habló con Telepacífico y aseguró que no es la primera vez que su círculo sufre estos crímenes, pues su mamá fue asesinada en 2023 por una presunta venganza.
Sobre el triple homicidio, Valentina indicó que Nohelia, de 74 años, era su tía materna; Juan Esteban, de 41 años y quien tenía síndrome Down, era su primo, y uno de los heridos es su tío, esposo y padre de las víctimas mortales. De acuerdo con la investigación, el ataque fue dirigido. Sin embargo, se cree que María del Mar Mosquera falleció por estar sentada cerca al lugar de los hechos y no sería objetivo de los sicarios.
Según Valentina, quien vive en España debido a amenazas en su contra, la tragedia llegó a la vida de los López el 18 de julio de 2023, cuando su pareja sentimental fue asesinada por sicarios frente a ella en un restaurante en Cota, Cundinamarca, y fue culpada por ello.
La joven sostuvo que fue novia de John Beiker Arroyo Martínez, un hombre que, según ella, era narcotraficante y, tras su homicidio, los familiares de él la responsabilizaron, afirmando que había orquestado la comisión del atentado armado.
“Quedaron con odio por la muerte de su hermano, pensando que yo había hecho eso, que lo entregué o lo maté, pero yo no lo hice. Yo no merecía eso, no les robé un solo peso”, narró.
La mujer explicó que, luego de la muerte de su entonces pareja, iniciaron las acusaciones. Sin embargo, ella indicó que no quedaron cuentas pendientes con la familia del fallecido.
“En mi casa no había nada guardado, quedó una caja fuerte vacía y ellos pidieron que se les enviara una tablet y un bolso, los cuales fueron enviados. Eso fue lo único que había, además de un pantalón y una camisa”, dice Bedoya.
Posteriormente, según la mujer, los hermanos de su expareja comenzaron a insultarla, crearon perfiles falsos en redes sociales para intimidarla y filtraron fotos íntimas de la joven.
Aunque ella pensó que todo terminaría pronto, dijo en su conversación con el medio de comunicación que esas personas acabaron con la vida de su madre en retaliación por el asesinato de John Beiker Arroyo.
“Dos meses después mataron a mi mamá y la banda que lo hizo se dedica al narcotráfico y les dicen Los Pescaditos de Buenaventura. Son muchos hermanos, también hay mujeres metidas en eso”, aseguró.
Según Bedoya, uno de los miembros de este grupo es Álvaro Arroyo Martínez, hermano de su entonces pareja y quien estaría relacionado con otros homicidios en diferentes partes del país.
“Estoy cansada y temo por mi vida, porque con matar a mi mamá injustamente no fue suficiente”, dijo y añadió entre lágrimas que “ellos han matado a muchas personas, solo que todo el mundo les tiene miedo y nadie habla, yo hoy alzo la voz por todos”.
La banda Los Pescaditos es una facción del Grupo Delincuencial Organizado Los Shottas de Buenaventura y, según Valentina, serían los responsables de la muerte de sus familiares en la masacre del Bulevar del Oriente, pues la habrían intimidado diciéndole que les quitarían la vida.
“Me amenazaron diciendo que iban a acabar con toda mi familia y con mi primo ‘el enfermo’. Por eso estoy totalmente segura de que esto que pasó fue culpa de ellos”, manifestó la joven.
Los Shottas aseguraron que no están involucrados con la masacre
En un comunicado con fecha del 13 de enero, día en que la joven dio sus declaraciones sobre los asesinatos, la banda criminal hizo énfasis en que no tiene poder en Cali y que, por tanto, sus miembros no están detrás de la masacre que dejó como saldo tres personas muertas y dos más heridas.
“Los Shottas no tienen ningún tipo de injerencia en la ciudad de Cali, ni en nada que nos pueda comprometer en hechos que usted menciona”, se lee en uno de los párrafos del oficio dirigido a Valentina Bedoya.
Incluso, ese grupo delincuencial destacó que solo opera en la ciudad de Buenaventura, y que los integrantes del mismo “no tienen nada que ver con ese tipo de comportamientos”.
Justificando su supuesta inocencia en este caso, Los Shottas le solicitaron a la joven que, si ella está segura de que la estructura es responsable de la masacre ocurrida en el Bulevar del Oriente, presente las pruebas correspondientes ante las autoridades.
“Debido a las acusaciones de la señora Valentina Bedoya López en relación con los hechos que lamentamos, por situaciones que afectan su integridad física y emocional, de antemano y sin causar molestia, le pedimos a la señora y persona alrededor dándole instrucciones de lo que debe decir que si tienen pruebas que puedan involucrar a Los Shottas, las hagan saber a las autoridades competentes”, aseveró la organización criminal.
Finalmente, el grupo delictivo, que actualmente está en diálogo sociojurídico con la banda rival Los Espartanos, con la mediación del Gobierno Nacional, mencionó que sus actividades son distintas a las expresadas por Bedoya.
“Respetamos su dolor, pero dejamos en claro que Los Shottas no somos una organización narcotraficante y nada tiene que ver con situaciones que usted menciona, ya que no es política de nuestra organización”, concluyó el comunicado.
Por su parte, Valentina Bedoya pidió a las autoridades que investiguen la masacre para que la muerte de sus seres queridos no quede impune.
“Les pido que, por favor, me ayuden, les suplico que me ayuden a agarrarlos para que no le hagan más daño a nadie”, puntualizó la joven, quien dijo que la única forma en la que podrá descansar será sabiendo que los responsables están tras las rejas.