Momentos de tensión se vivieron en la tarde de este miércoles a las afueras de la cárcel de Tuluá, donde decenas de familiares de reclusos protagonizaron enfrentamientos con unidades de la Policía y del Esmad ante la posibilidad de que algunos privados de la libertad sean trasladados.
Al parecer, algunas madres y otros allegados de los internos intentaron ingresar a la fuerza al centro penitenciario. Esto, debido a la incertidumbre que genera un posible traslado de los internos del patio 8, donde se registró la muerte de 51 personas en medio de un incendio en la madrugada de este martes.
En imágenes quedaron registrados los instantes en que ciudadanos y uniformados se enfrentaron, y en algunos casos unidades del Esmad y de la Policía hicieron uso de la fuerza, aparentemente, para controlar la situación.
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Luego del altercado, las autoridades optaron por llamar a un representante de cada interno para que ingrese al centro reclusorio y entregue las pertenencias del recluso. Sin embargo, no les permitieron tener contacto directo con sus familiares, sino únicamente dejar los elementos.
Aunque hasta el momento el Inpec no ha confirmado si los internos serán llevados a otros centros reclusorios, el director del Instituto, el general Tito Castellanos, explicó que se está estudiando si es necesario.
“Se evaluó con el personal de ingenieros de la Uspec (Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios) la solidez de la infraestructura de los pabellones 8, 9 y 11 para saber si continuamos con personal de privados de la libertad (en esos tres patios) o van a ser ubicados en otros establecimientos de la región”, señaló el Director del Inpec.
Posteriormente, el General indicó que tendrán en cuenta dos conceptos más para determinar si es necesario evacuar a los reclusos después de la revisión del pabellón 8. Una vez, Inpec conozca los informes de Gestión de Riesgo y de los Bomberos se confirmaría el traslado.