Dos exdirectivos de Sistema Integrado de Transporte Masivo de Cali (Metrocali) fueron imputados como presuntos responsables de irregularidades en contratación.
Se trata de Luis Fernando Lian Arana, expresidente de Metrocali, señalado por el delito de celebración indebida de contratos, y Rodrigo Salazar Sarmiento, ex jefe jurídico de la entidad, por el delito de prevaricato por acción.
La investigación contra los exdirectivos surge de la celebración de un contrato de en octubre de 2007 para la construcción de la terminal del barrio Calima con la empresa Israelí Hafira Ve Hatziva por un valor de $22.750 millones.
En las verificaciones se constató que esta firma extranjera fue escogida sin que tuviera la experiencia para este tipo de proyectos y que su recorrido estaba acreditado en demoliciones e instalación de redes hídricas, expone la Fiscalía.
En marzo de 2009 se firmó el acta de inicio del proyecto y Metrocali desembolsó un anticipo de 30%, algo más de $6.800 millones, expone la entidad.
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El dinero habría sido consignado en una cuenta personal del representante legal del contratista, contrario a lo que indicaba la normatividad vigente para la época, añade.
Seis años después, el contrato fue liquidado por Metrocali porque la obra no fue ejecutada. Sin embargo, la empresa constructora no devolvió los recursos que le fueron reconocidos por concepto de anticipo, concluye la investigación.
Rodrigo Salazar Sarmiento, quien actualmente ocupa el cargo de secretario de Desarrollo Territorial y Participación Ciudadana de Cali, se pronunció sobre los señalamientos.
"No se me cuestiona por actos de apoderamiento de recursos públicos o por haber permitido que los contratistas se los apropiaran, lo que sería corrupción; tampoco por haber suscrito el contrato que, repito, se firmó en octubre de 2007, sino por haber aprobado la garantía, por lo cual se me señala de prevaricato", argumentó en un comunicado publicado en su cuenta de Twitter.
En la comunicación afirma que la Fiscalía "no encontró razones para que se me impusiera alguna medida de aseguramiento, por lo que, en el acto de la audiencia, en forma unilateral se hizo retiro de la solicitud, la cual fue acogida por el juez".
Salazar asegura que la Contraloría y la Personería Municipal lo excluyeron de "de cualquier cuestionamiento, desvinculándome de toda investigación".
La Fiscalía aseveró que los exdirectivos de Metrocali no aceptaron los cargos imputados en la audiencia celebrada el pasado 24 de febrero.