Una vez más, los gobernadores de los diferentes departamentos le están haciendo un llamado al presidente Gustavo Petro para que centre su atención en los problemas de inseguridad que se están viviendo en las regiones del país por cuenta del accionar de grupos delincuenciales, del ELN y las disidencias de las Farc.
“Con enorme desasosiego los Gobernadores de Colombia alzamos nuevamente nuestras voces para expresar que, a pesar de nuestros esfuerzos, sentimos cada vez más agotados los canales de comunicación con el Gobierno Nacional para lograr que se escuche la voz de las regiones. Lo anterior es fundamental para tomar decisiones efectivas que permitan frenar el accionar de las organizaciones criminales que se han fortalecido en los territorios al amparo de las improvisaciones y de la Paz Total”, se lee en un comunicado firmado por Roberto Jairo Jaramillo, presidente de la Federación Nacional de Departamentos.
Y no es para menos, pues un informe del Centro de Recursos para el Análisis del Conflicto (Cerac) reveló que en el territorio nacional se registraron 21 acciones ofensivas atribuidas al ELN durante abril pasado, frente a 18 registradas en marzo y siete combates, el mismo número que en febrero. En cinco de esos eventos violentos hubo víctimas: cuatro personas murieron, 22 resultaron heridas y cinco fueron secuestradas (todas ya liberadas)”.
Esas acciones violentas ocurrieron en Antioquia (8), Norte de Santander (8), Valle del Cauca (5), Cauca (3) y en Arauca, Bogotá, Nariño y Santander (una en cada departamento).
El frente más belicoso durante el primer semestre de 2023 fue el Carlos Patiño, que generó 60 acciones, seguido de la Columna Móvil Jaime Martínez, que opera en el Cauca y Valle del Cauca, con 41 hechos criminales.
“Superaremos tantos momentos difíciles y ojalá que el Presidente entienda que es un clamor, no solo del departamento y de los gobernantes, sino de los ciudadanos que están pidiendo más seguridad”, dijo Clara Luz Roldán, Gobernadora del Valle.
En el comunicado firmado por los gobernadores, se afirma que actualmente se están vulnerando los derechos y libertades de las personas; los delincuentes intimidan, amenazan y atacan a la población civil y día tras día aumentan las dolorosas cifras de asesinatos de miembros de nuestras Fuerzas Militares y de Policía.
“Ante este crudo panorama, ¿cómo podrá la nación garantizar unas elecciones transparentes y seguras? ¿Cómo podremos seguir hablando de paz? Los departamentos y municipios vemos con desesperanza la actitud del Gobierno Nacional de hacer oídos sordos. A pesar de nuestros llamados, nuestra voluntad de articulación, nuestros intentos de trabajo en equipo, la única respuesta ha sido una actitud de desconocimiento a las autoridades territoriales y locales”, sostienen los gobernadores en la carta.
Pocas medidas en Nariño
El pasado sábado las disidencias de las Farc emboscaron y masacraron a tres policías en una vía del municipio de Morales, Cauca. Las víctimas fueron identificadas como el subintendente Michael León, y los patrulleros Jorge Laureano Orozco y Eimy Marcelina Rodríguez. Horas después, el frente Jaime Martínez reconoció su responsabilidad en el asesinato y, por medio de un video divulgado, mostraron como botín de guerra los objetos personales robados a los uniformados.
Un día después, un carrobomba que detonó en el corregimiento de Timba (del municipio de Buenos Aires, Cauca) cobró la vida del subintendente de la Policía Carmelo José García Gómez.
En una corta alocución, el Jefe de Estado anunció que solo patrullarán la zona soldados profesionales, y no jóvenes que estén prestando el servicio militar. Además, dijo que habrá inversiones para sustituir cultivos ilícitos y le pidió a los grupos armados reducir las hostilidades contra la población civil.
“Cualquier negociación que empiece en el territorio nacional con grupos armados debe tener en cuenta que antes que un cese al fuego lo que tenemos es un cese de hostilidades a la población civil”, dijo el Mandatario.
Según cifras del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, Indepaz, entre el 1 de enero y el 3 de agosto de 2023 en el Cauca han sido asesinados 22 líderes y defensores de derechos humanos y se han registrado 4 masacres que han dejado un total de 12 víctimas.