María Luisa Botero, hija del exministro del Deporte, Andrés Botero, fue capturada por ser parte de una organización criminal de lavado de activos en Medellín.
La mujer, la cual es apodada como Lulú, fue capturada junto al narcotraficante Ferney de Jesús Cardona Bello, alias Soya.
Las autoridades de se llevaron la sorpresa cuando, en medio de los operativos, fue capturada esta mujer de la alta clase de Medellín, la cual cayó en medio de la Operación Galicia.
La mujer se dedicaba al diseño de modas, pero también estaba muy ligada al deporte debido a su papá. Además, fue deportista de alto rendimiento y tiene una gran pasión por los caballos.
Según las autoridades, alias Lulú pertenecía a la red de lavado de activos de alias Soya, el cual pertenecía al Clan del Golfo.
Las operaciones se realizaron entre el 29 de febrero y el 02 de marzo del presente año, en diversos municipios de Antioquia, en donde se logró la extinción de dominio de 24 inmuebles, siete empresas, siete cuentas bancarias, además de algunos CDT con avalúo comercial de $ 13.000 millones.
La cabeza de la red de lavado de activos para alias Soya era Juan Carlos Salazar, alias el contador, el cual tenía a su mando a cinco personas, entre ellas María Luisa Botero.
De acuerdo con información conocida por Semana, esta red lo que hacía era crear empresas de papel en la región del Urabá y la ciudad de Medellín, las cuales tenían como propietarios a familiares o colaboradores de confianza.
De alias Soya se sabía que inició en el mundo delincuencial aparentando ser un gran empresario, pero esta fachada se le cayó rápidamente. Por ello, las autoridades lo seguían desde hace mucho tiempo. Sin embargo, las labores de localización no eran tan sencillas porque cambiaba de casa y de carro cada 15 días y pagaba cuentas de $ 15 millones para estar fuera del radar de las autoridades.