En las últimas horas fue desmantelada una organización internacional dedicada al tráfico de drogas desde Colombia hacia los Estados Unidos. Una de las particularidades era que se aprovechaban de comunidades indígenas para sus actuaciones.
Durante un operativo coordinado entre la Policía Nacional de Colombia y la Agencia para la Administración de Control de Drogas, DEA, logró desarticularse esta estructura criminal que movilizaba gran cantidad de toneladas de cocaína hacia la unión americana, a través de una compleja estructura con múltiples intermediarios.
Según las averiguaciones, la coca era cultivada la subregión del Catatumbo, en el departamento de Norte de Santander, luego se movilizaba hasta las costas de La Guajira, con la venia de un grupo de indígenas wayuu y posteriormente se embarcaba hacia Puerto Rico donde se encontraba un equipo que era el responsable de concretar el despacho con destino final a los Estados Unidos.
Las autoridades dan cuenta que la droga era proveída por diferentes grupos armados insurgentes como las disidencias de las Farc y el ELN.
Uno de los puntos que más ha llamado la atención de las autoridades tiene que ver con el aprovechamiento de los pueblos originarios para ser involucrados en la ruta de exportación de droga. Medios de comunicación como El Tiempo, han reflejado que un intermediario clave en toda la operación era un palabrero wayuu.
En este caso, el hombre, quien de profesión es abogado, era el responsable de coordinar la llegada de los cargamentos de droga hasta su comunidad donde eran ocultados hasta su posterior embarque con destino a territorio estadounidense.
El éxito del negocio
El éxito de esta organización criminal estaba en la posibilidad de ocultar la droga en un territorio inhóspito alejado del radar de las autoridades policiales. Eso fue suficiente para convertirse en una de las rutas que operó durante mayor cantidad de tiempo pasando de manera desapercibida ante el ojo de las autoridades policiales y demás organismos de investigación.
En el operativo conjunto, fueron arrestadas varias personas, entre ellos dos narcotraficantes colombianos y uno de nacionalidad dominicana, quien es conocido como alias El Flaco, quien era el encargado de ser intermediario en la labor de garantizar la llegada de las sustancias estupefacientes hasta los Estados Unidos.
Cabe resaltar que la nación norteamericana ha solicitado en extradición a los implicados en este caso para comparezcan y respondan por sus delitos ante la justicia de ese país. Se espera que, en las próximas horas, Colombia decida si procede con la entrega de los ciudadanos detenidos.