Máxima tensión en la zona rural del municipio de Silvia, Cauca, por los combates que se registran entre las disidencias de las Farc y el Ejército de Liberación Nacional, ELN.
“Las comunidades indígenas y campesinas están en medio de esta confrontación, la cual ya va a completar dos días, aunque los combates son por momentos, la gente está muy preocupada porque es real el temor que existe a la hora de movilizarse por esta zona, porque es disputada por actores armados ilegales y en los últimos días estos choques aumentaron, incrementándose también la presión hacia las comunidades”, agregaron los funcionarios de gobierno.
De ahí que las autoridades locales, así como los líderes indígenas y campesinos, activaron planes de emergencia, los cuales empiezan con alertar a los pobladores de estos sectores para que eviten movilizarse en las horas de la noche, o cuando se presentan los combates, buscar la forma de refugiarse en los sitios acordados.
“Ya son dos días que se presentan confrontaciones armadas en esta parte de Silvia, en la tarde del pasado 25 de noviembre también estos actores armados se enfrentaron en el sector de Loma Larga, que pertenece al resguardo de Tumborao, quedando atrapadas varias familias indígenas por la intensidad de los combates”, indicaron por su parte integrantes del Consejo Regional Indígena del Cauca, Cric.
Como bien lo han denunciado esta organización social, como entidades humanitarias como Indepaz y hasta las mismas autoridades, en esta parte del centro del Cauca se presenta una lucha armada muy marcada entre el frente Dagoberto Ramos de las Farc y la guerrilla del ELN, situación que ya va a completar más de ocho meses.
Esta misma situación también se presenta en los municipios vecinos de Totoró, Inzá y Páez-Belalcázar, donde estas organizaciones armadas ilegales luchan militarmente por tener el control de las veredas y corregimientos de esta zona del centro y oriente del departamento del Cauca.