El Valle del Cauca fue el tercer departamento con más casos de personas confinadas debido al recrudecimiento de las acciones armadas entre distintos grupos al margen de la ley y el Ejército Nacional durante el 2022, así lo dio a conocer el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) en su balance de Retos Humanitarios.
Según la Institución, fueron 4028 las personas que permanecieron confinadas en sus territorios debido a combates o artefactos explosivos en el departamento. Además, la Cruz Roja informó que en desplazamientos masivos, el Valle del Cauca ocupa el tercer puesto a nivel nacional registrando el 12 % de estos hechos en Colombia, un total de 7001 individuos.
En desplazamientos individuales el Valle ocupa el segundo lugar a nivel nacional según la CIRC, reportando un total de 18014 personas afectadas, el 14.6 % de todo el país en 2022.
Situación humanitaria en Colombia continuó empeorando durante 2022
El 2022 fue un año critico en materia humanitaria en el país. Se registraron más de 58.000 desplazamientos masivos, 123.000 individuales, 39.000 confinamientos y 515 víctimas de artefactos explosivos.
Así lo señala el informe anual del Comité Internacional de la Cruz Roja en Colombia (CICR), presentado este miércoles. El informe explica que estas preocupantes cifras se registraron por las dinámicas cambiantes del contexto territorial, la reconfiguración de los actores armados no estatales, la continuidad del control social, el incremento de la disputa por el territorio y la débil presencia de las instituciones estatales que históricamente ha existido en las zonas más afectadas por los conflictos armados.
"Los indicadores de las múltiples consecuencias humanitarias muestran que la población civil sigue sufriendo los peores efectos de los conflictos armados y la violencia. El año pasado fuimos testigos de la dura realidad que tuvieron que vivir las comunidades de varias regiones del país, poblaciones enteras que no pudieron cazar, pescar o sembrar sus cultivos por el aumento de la confrontación armada y la presencia de artefactos explosivos en sus territorios", señaló Lorenzo Caraff, jefe de la Delegación del CICR en Colombia, durante la presentación del informe
Entre el miedo y la zozobra
El informe titulado “Retos Humanitarios 2023 Colombia”, revela que durante el año pasado se documentaron 400 presuntas violaciones del DIH y otras normas humanitarias, de las cuales más de la mitad corresponden a homicidios, amenazas, violencia sexual, empleo de artefactos explosivos con efectos indiscriminados, reclutamiento, uso y participación de niños, niñas y adolescentes en las hostilidades, privaciones arbitrarias de libertad, tratos crueles, inhumanos o degradantes, entre otras conductas graves.
Esto quiere decir que durante este periodo de tiempo se registraron 515 víctimas de artefactos explosivos, de los cuales el 54% fueron civiles y 43 corresponden a menores de edad. La cifra más alta en seis años.
Además, se presentaron 209 casos de desaparición relacionados con el conflicto, siendo Arauca, Chocó, Cauca, Nariño y Norte de Santander las zonas más afectadas, pues allí se concentró el 79% de los casos.
Por otro lado, en 2022 el desplazamiento individual afectó al menos a 123 mil personas, siendo Arauca; Valle del Cauca; Nariño y Antioquia los más afectados, y el desplazamiento masivo a otras 58 mil, principalmente en los departamentos de Nariño, Chocó, Valle del Cauca y Córdoba.
Así mismo, 39 mil personas estuvieron confinadas por el recrudecimiento de las acciones armadas y la presencia de artefactos explosivos en sus territorios. El 64 % de ellos se identificó como indígena y el 27 %, como afrodescendiente.
A este panorama se sumaron los ataques contra la asistencia de salud. La Mesa Nacional de Misión Médica reportó 426 agresiones contra el personal de salud, instalaciones y vehículos sanitarios, siendo particularmente graves los hechos que se registraron en las zonas más afectadas.