Aumentó aún más la tensión entre las comunidades indígenas del norte del Cauca tras el asesinato del guardia indígena Édgar Tumiñá en medio de una incursión armada que se registró en pleno casco urbano del municipio de Toribío, Cauca.
De acuerdo con la versión de varios periodistas nasa, los mortales hechos sucedieron alrededor de las 8:48 p.m. de este sábado 1 de marzo, cuando sujetos armados interceptaron al líder indígena para después dispararle en varias ocasiones en la cabeza.
“Los testigos señalan que los atacantes se movilizaban en motocicleta al momento de ejecutar este ataque contra el compañero, quien lamentablemente terminó con varios disparos en la cabeza. Luego de esto, los pistoleros huyeron hacia el Resguardo de San Francisco, mientras que Édgar Tumiñá fue llevado de urgencia al hospital local, pero lastimosamente ya no registraba signos vitales cuando fue valorado por los médicos”, agregaron los comunicadores indígenas de esta zona del país.
Registrado el hecho, trascendió que Tumiñá, de 48 años de edad y padre de dos niños, era un reconocido defensor del territorio e integrante activo del Plan de Vida Proyecto Nasa en la zona norte del Cauca. Además de coordinador de la guardia.
“Su compromiso con la protección de la comunidad lo llevó a ser blanco de amenazas, presuntamente por parte del Frente Dagoberto Ramos, grupo armado con presencia en este sector del Cauca y cuyos integrantes ahora están enfrentados con otros grupos armados ilegales que también tienen presencia en esta parte del territorio”, agregaron los periodistas.
Y es que este no es el primer golpe que sufre la familia Tumiñá. En el año 2014, su hermano Manuel Tumiñá Gembuel también fue asesinado por los integrantes del entonces Sexto Frente de las Farc, mientras cumplía su labor como guardia indígena, denunciaron líderes comuneros de Toribío al exponer que el asesinato de Édgar Gembuel se registra en medio de las acciones que adelanta la comunidad para expulsar a los grupos armados ilegales de sus territorios.
Con este crimen, ya son dos los kiwe thegnas o guardia asesinados en menos de un mes en el municipio de Toribío, lo que aumenta la zozobra entre la comunidad. Los integrantes de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca, Acín, condenó el hecho y exigió justicia frente a esta nueva agresión contra sus líderes.
“Exigimos que pare esta matanza. Exigimos que nos respeten la vida. Exigimos verdad y justicia. Acompañamos a la familia de Édgar y a la comunidad de Toribío en este momento de dolor”, agregaron los integrantes de esta organización social.
Es que esta nueva víctima de la marcada violencia que se registra en esta parte del país era también reconocida por liderar proceso de formación entre los niños y niñas nasa, coordinando las escuelas de formación para que conviertan en guardianes de sus territorios.
“Nuestro proceso artístico, sufre por el vil asesinato de nuestro líder Kiwe Tenga, quien aportó a nuestro proceso, quien con sus más de 100 niños, niñas, adolescentes y jóvenes guardia, siempre estuvieron para apoyar a Fodaarct-Grupo de danza, por eso compañero, mayor, amigo Édgar te llevaremos en el corazón”, expresaron los integrantes de este colectivo cultural.
A raíz de estos hechos, las organizaciones indígenas del Cauca y del país han hecho un llamado urgente a las autoridades nacionales e internacionales para que se garantice la seguridad de los líderes comunitarios y ancestrales y se ponga fin a la violencia que azota el territorio, fenómeno que se registra cuando el departamento está completamente militarizado.
Registrado este asesinato, y como bien han denunciado tantos líderes sociales como indígenas, en estos momentos en municipios como Toribío y otros del norte del Cauca se registra una intensa confrontación entre la columna móvil Dagoberto Ramos de las disidencias de las Farc, el ELN y el frente 57 Yair Bermúdez, organizaciones armadas ilegales que buscan controlar estos territorios, como bien lo alertó en su momento entidades como la Defensoría del Pueblo.