“Todo niño viene con un pan debajo del brazo”, reza el adagio popular. Y parece, según las antiguas tradiciones, que también traen la suerte y la prosperidad con ellos. Según algunos, soñar que hay un embarazo en la pareja, o no soñarlo, sino que el anuncio sobre un hijo sea una realidad, trae suerte, prosperidad y nuevos horizontes. Por eso es necesario si se está en alguna de estas situaciones correr e intentar que la suerte acompañe a la familia.
Cabe anotar que la interpretación de los sueños es subjetiva y compleja, por lo que no hay una clave universal para descifrar sus significados. Además, que la lotería es un juego de azar, por lo que llegar a ganarla depende de muchísimos factores asociados no solo con la suerte sino con la probabilidad. Sin embargo, también es importante decir que siempre que los embarazos simbolizan crecimiento y creatividad, desarrollo de nuevas ideas, transformación, cambio, evolución, y materializar los deseos de cuidar de otro ser humano. Es decir que también puede significar que se está listo para transmitir todos los conocimientos acumulados a una siguiente generación.
Recuerde también que si el sueño tiene que ver con un parto, ese puede ser aterrador y liberador y simboliza no solo la culminación de un proceso, sino el nacimiento de algo nuevo. Además de la liberación de emociones reprimidas. Los numerólogos expertos en interpretación de los sueños recomiendan que se debe siempre jugar el 68 y en caso de que se necesite otra cifra se debe jugar con las cifras del día en que llegó el sueño o nacerá la nueva criatura.