Además de darles mucho amor, también es importante que los dueños de las mascotas estén atentos a su bienestar físico y emocional. Aunque es indispensable que tengan un buen techo y comida que los alimente, la felicidad es un factor diferencial en la vida de perros y gatos.
Aunque cada animal es un mundo y se expresan de diferentes maneras, existen algunas señales de que la mascota es feliz y plena con su familia humana.
Según el portal el portal ‘ExpertoAnimal’, se asegura los perros tienen cinco comportamientos claros que pueden ayudar a saber si el can se siente pleno:
- Invita a sus dueños a jugar: Esto se puede ver cuando el perro levanta la parte trasera de su cuerpo, doblando las patas delanteras. Luego, mira fijamente al humano y de repente sale a correr de manera divertida. Además, es un claro ejemplo de felicidad si a esto se le añaden saltos, pequeños ladridos y lamidas.
- El perro se apoya en los humanos: Cuando los dueños están sentados o acostados puede pasar que el canino llegue de un momento a otro a apoyar las patas o la cabeza sobre los humanos. Esto significa que el perro es feliz y confía en su familia.
- Se revuelca en el pasto: En los paseos, el perro se puede colocar boca arriba y comenzar a restregar su lomo en el pasto, llamando la atención de sus dueños y luego se levanta muy cansado, ya que está disfrutando de la compañía de sus humanos y se está divirtiendo mucho.
- Le gusta que le consientan el estómago: “Cuando un perro se tumba boca arriba demuestra que está a gusto con su entorno. Demuestra confianza y si lo hace es porque su bienestar es excelente”, comenta el citado portal.
- Toma una pausa en medio del juego: Cuando el perro está jugando con otros animales y de un momento a otro se queda quieto y jadea, esto quiere decir que, “no hay duda de que está pasando por uno de los mejores momentos de su día”, afirma ExpertoAnimal.
En el caso de los gatos, las señales son distintas a los perros y pueden ser más complicadas de reconocer debido a la naturaleza del animal.
Los profesionales describen frecuentemente a los gatos como animales difíciles de comprender, puesto que cuando un gato ronronea, generalmente se cree que está feliz mientras que cuando tiene las orejas hacia atrás no lo está, sin embargo, esto no siempre es así.
Las caras de los felinos parecieran no decir mucho sobre sus emociones y, de hecho, un estudio sobre el tema mostró que la mayoría de las personas leen correctamente las expresiones de sus gatos.
Por ello, muchos piensan que estos felinos son “inescrutables” y los estudios respaldan esta creencia. Una investigación donde participaron más de seis mil personas en 85 países, la mayor parte dueños, observaron videos cortos de gatos y comentaron sobre su estado de ánimo.
Solamente el 60 % de los participantes acertaron sobre las emociones reales de las mascotas, y el 13 % de los voluntarios obtuvieron un puntaje del 75 % o más.
“Los gatos nos dicen cosas con sus expresiones, con sus caras, y si tenés la habilidad, podés descifrar qué quieren comunicar”, comenta Georgia Mason, experta en comportamiento biológico de la Universidad de Guelph en Ontario, Canadá.
“Algunas personas pueden hacerlo y eso no significa que tengan poderes especiales, sino que los gatos son difíciles de descifrar”, sostiene la profesional.
En este estudio las mujeres tuvieron mejor desempeño que los hombres, ya que obtuvieron mejores puntuaciones, pero por un margen pequeño.
Por otra parte, a los jóvenes les fue mejor que a los mayores y los ganadores indiscutibles fueron los expertos profesionales de la salud animal, es decir los veterinarios.