Durante el último año, las estrellas más brillantes de Hollywood se han visto obligadas a vestir sus trajes de gala en sus salones para aceptar los premios, o han llevado pijamas de lujo. Pero este domingo, volvieron a recorrer la alfombra roja de los Óscar.
Y aunque las mujeres estaban tan impresionantes como siempre, los hombres -quizás inspirados por el vestido-esmoquin del actor Billy Porter en los Premios de la Academia hace dos años- lucieron sus mejores galas.