En compañía de su dueña, la neuropsicóloga clínica Lucía Ledesma, Harley 'el tuerto' -apodado así por una discapacidad visual- juega durante dos horas con los trabajadores del Centro Médico Nacional 20 de Noviembre, donde ha participado en terapias para pacientes con afecciones psiquiátricas, psicológicas o neuropsicológicas.
Algunos "compañeros inmediatamente quieren jugar con Harley (...) Hay que considerar el tiempo de privación de contacto físico que llevamos, sobre todo entre el personal de la primera línea de acción, que incluso se ha segregado de su propia familia por temor a un contagio", afirma la doctora Ledesma.