Las decenas de focos de incendio que arrasan la costa oeste desde hace días han dejado al menos 35 muertos desde el inicio del verano boreal, 27 de ellos en la última semana en los estados de Washington, Oregón y California.
En total, unas cinco millones de hectáreas han sido arrasadas por el fuego, lo que ha llevado a líderes demócratas a insistir en la necesidad de luchar contra el cambio climático.