Francia, vigente campeona del mundo, cerrará la primera fase de Qatar contra Túnez hoy, en un partido casi intrascendente para los 'Bleus', ya clasificados para octavos de final, aunque los norteafricanos aún tienen posibilidades, mínimas, de meterse en los cruces.
Dos partidos y dos victorias, con actuaciones convincentes (4-1 a Australia y 2-1 a Dinamarca), han llevado a octavos al equipo de Didier Deschamps, que salvo catástrofe (derrota frente a Túnez y goleada de los 'Socceroos') tiene además asegurado el primer puesto de su grupo, que en el primer cruce se medirá al segundo del grupo de Argentina.
Deschamps, no obstante, reiteró en conferencia de prensa que su equipo saldrá a competir: "No hay que tirar este tercer partido (...) Es un encuentro de Copa del Mundo. No es decisivo, pero sí es importante para mí y para los jugadores. ¿Habrá cambios? Sí ¿Cuántos? No lo sabrán y, sobre todo, el rival tampoco lo sabrá".
Todo está tan claro para los 'Bleus' que el nombre que más se escuchó en la rueda de prensa fue el de Karim Benzema, después de que medios españoles especularan con la posibilidad de que el Balón de Oro, que abandonó la concentración en la víspera del Mundial por una lesión, regresara a Catar para jugar algún partido con su selección, algo que quedó descartado.